Rebeca Mariscal es traductora voluntaria de Lengua de Señas Bolivianas. Defiende los derechos de las personas con deficiencias auditivas

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17 de agosto de 2019, 9:45 AM
17 de agosto de 2019, 9:45 AM

Cuando Rebeca Mariscal Delgadillo era niña recibió un folleto del abecedario de la Lengua de Señas Bolivianas (LSB). Nunca se imaginó que aquel papel sería parte de uno de los cambios más importantes que tuvo su vida.

Aprendió las señas y mediante ellas se comunicaba con sus parientes, solo por jugar. Ella cree que aquello fue parte de un proyecto que el Señor trazó en su vida, que la llevó a servir a personas con deficiencia auditiva.

Su vida

Rebeca es cruceña y tiene 31 años. Sus padres son Juan Mariscal y Teresa Delgadillo.

Es ingeniera en Administración de Empresas y trabaja en Letrao, empresa de asesoramiento en proyectos de tesis. También está estudiando Diseño y Publicidad y Lenguas de Señas Bolivianas, curso que está a punto de culminar.

Actualmente es una de las intérpretes de LSB en la Misión Evangélica Maranatha, iglesia a la que asiste regularmente.

Servicio al prójimo

Nunca olvidará aquel día de julio de 2017, durante un seminario de su iglesia en Brasil, cuando se dobló el pie y tuvo que sentarse en la primera fila del templo, junto a las personas con deficiencias auditivas y, sin ninguna técnica o lenguaje profesional, empezó a comunicarse con ellas.

Dos intérpretes de la iglesia la vieron y le preguntaron de qué país era. Ella les dijo que de Bolivia. Y que casualidad unos meses después ellos vinieron a otro seminario a nuestro país y la buscaron, estrechando su vínculo con la Comunidad de Sordos.

Fue entonces cuando descubrió su vocación, se contactó en Santa Cruz con personas con dificultades auditivas e inició su formación académica de traductora.

Defiende la inclusión

En las actividades de la iglesia Maranatha Rebeca siempre está al lado de las personas con deficiencias auditivas. Les traduce todo lo que se habla y los acompaña durante su permanencia en el templo.

“Tener una traductora ha sido de gran ayuda para ellos, pues se sienten cómodos y protegidos. Ahora cada vez más personas con esta deficiencia asisten a la iglesia”, relata.

Cree que en Santa Cruz no hay discriminación directa hacia estas personas, pero que la barrera de la comunicación hace que sin querer se los margine.

Asimismo, considera que el problema es que “la gente no sabe qué hacer cuando está al lado de una persona con deficiencia auditiva. No se los toma en cuenta y ellos se sienten discriminados”.

En nuestro país existen 36 lenguas reconocidas por la Constitución Política del Estado. Sin embargo, la Lengua de Señas Bolivianas no está tomada en cuenta entre ellas.

La Comunidad de Sordos Bolivianos ha solicitado al Poder Legislativo que la LSB sea incluida como la lengua # 37.

Contenta consigo misma

Dice que en este oficio aprendió mucho. “Me han enseñado a ser paciente, perseverante y a valorar lo que tengo. Ellos con esa dificultad siguen su vida, y a veces uno ‘se ahoga en un vaso de agua’. Son buenas personas, de sentimientos puros. Fácilmente se dan cuenta del estado de ánimo que uno tiene, de nuestro verdadero humor, pues su lenguaje tiene que ver mucho con la comunicación facial, corporal y de las manos”, expresa.

Ha llegado a forjar una amistad con varias de estas personas, que ya son parte importante de su vida. En su cumpleaños Rebeca los invitó a su casa y compartió con ellos su celebración.

Trata de incluirlos en diversas actividades y que los traten de manera normal, porque ellos son igual que todos, no son enfermos ni tienen deficiencia mental, solo se comunican de otra manera, enfatiza.

Dice que aprender el LSB no es difícil e insta a que más personas lo hagan, para servir a quienes tienen problemas auditivos.

Trabajar con ellos la hace sentir bien, porque está siguiendo el mandato del Señor de amar a su prójimo, concluyó.

Dulce. Las estrellas brillan en el cielo, representa en la imagen

FOTO: REYNALDO SOLIZ/ ESCENARIO: SANTA CRUZ BEER COMPANY DOWNTOWN/ VESTUARIO: L’ARANJA/ ARREGLO PERSONAL: SALÓN YESNAI