Negzzia, la modelo iraní que huyó de su país para evitar ser castigada, vive en París y sueña con trabajar de maniquí

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5 de julio de 2019, 14:30 PM
5 de julio de 2019, 14:30 PM

El régimen persa la iba a condenar a 148 latigazos por una sesión de fotos en la que posó desnuda. Huyó de Irán para evitar el castigo y se refugió en Francia, pero allí todas las ofertas que recibió hasta el momento implicaban propuestas deshonestas. Esa es la historia de Negzzia, la joven que se hizo famosa por su impactante historia.

Tras dejar su país de origen estuvo en Estambul, donde pudo trabajar durante un año como modelo, pero tuvo graves problemas: "Me teñí el pelo de rojo y la gente me gritaba por la calle; lo peor eran las mujeres. Una vez, una me mordió por la calle", cuenta.

Hace nueve meses, la iraní, de 29 años, se trasladó a París y ya obtuvo el estatus de refugiada. Su caso hizo reaccionar incluso al ministro del interior francés, Christophe Castaner, que escribió en Twitter: "Naturalmente, se le ofrecerá el asilo".

Pero nada cambió aún para Negzzia porque aún no consigue trabajo y todos los que le ofrecieron ayuda le pidieron a cambio otros favores. "Me botaron de sus casas porque no me acostaba con ellos. Un día me decían que me amaban y como no funcionaba me recomendaban que me metiera en la prostitución", narró a la prensa internacional.

Tras pasar meses de casa en casa, un hombre llegó a encerrarla una semana en una habitación y otro trató de ponerla a trabajar como stripper, así que prefirió dormir en la calle. Llora al confesar que intentó quitarse la vida tres veces desde que vive en París.

A pesar de tantos problemas, ella no abandona su sueño. Sigue yendo al gimnasio para continuar asistiendo a casting con la esperanza de conseguir un trabajo que la ayude a mejorar su situación.