Catalizadores del crecimiento en la era digital
La economía digital no solo ha alterado la forma en que operan las empresas, sino que ha creado un terreno fértil para la innovación y el emprendimiento
Un nuevo amanecer en la Economía Digital
Dr. Enrique Portillo
Docente del Diplomado en Emprendimiento Digital Innovador de UTEPSA Postgrado.
En un mundo donde el cambio es la única constante, los jóvenes ejecutivos se encuentran en la primera línea de la transformación organizacional, siendo los modelos administrativos obsoletos del pasado y los silos organizacionales sus principales barreras. La economía digital no solo ha alterado la forma en que operan las empresas, sino que ha creado un terreno fértil para la innovación y el emprendimiento; detrás del problema siempre existe la oportunidad, que no la veamos no significa que no está ahí.
Para esto quisiera poner a su consideración 5 puntos que me parecen fundamentales para sacar el mejor provecho a esta oportunidad de innovar en la era digital.
En este artículo, exploraremos cómo estos elementos son fundamentales para el crecimiento y la evolución organizacional, y cómo pueden ser aprovechados por los líderes del mañana… o de hoy, quizá debería corregir.
1.-La Innovación como Proceso Continuo
La innovación no es un evento aislado; es un viaje. Debemos entenderla como un proceso continuo que nutre la creatividad y el pensamiento crítico. En este contexto, la "Innovación Corporativa Consciente", propuesta en el libro con el mismo nombre, invitábamos a transformar problemas en oportunidades. En lugar de temer al cambio, debemos abrazarlo, considerando cada desafío como una puerta abierta hacia nuevas posibilidades. Esto implica un cambio de mentalidad profundo y el reto para los jóvenes es aprender a confrontar la mentalidad “tradicionalista” de los liderazgos anteriores a ellos. Dos líderes de la industria automotriz a nivel Latinoamérica en dos momentos diferentes argumentaban que su “metodología de innovación” era “Six Sigma”. Al comentarles que ese era más bien un enfoque de mejora continua y que, aunque no lo pareciera, también tenía sus límites, ambos contestaron “cierto, y el problema es que somos tan buenos en ella, que ya llegamos a esos límites y nos hemos convertido en unidades de costo solamente”.
2.-Emprendimiento: El Motor de la Transformación
El emprendimiento, en su esencia, es la capacidad de identificar y aprovechar oportunidades donde otros ven barreras. Para los jóvenes ejecutivos, esto de nuevo significa adoptar una mentalidad proactiva y orientada al riesgo. En la economía digital, donde la agilidad es clave, el emprendimiento se convierte en el motor que impulsa la innovación. Las empresas que fomentan un entorno emprendedor no solo se adaptan a los cambios, sino que también crean tendencias. Recordemos un elemento importante del emprendimiento, la resiliencia; es la clave para abrazar la ambigüedad, la volatilidad, la fragilidad, la incertidumbre y sobre todo la alta posibilidad de falla que hoy nos plantea la economía digital
3.-Crecimiento y Evolución Organizacional
La intersección de la innovación y el emprendimiento es donde se produce el verdadero crecimiento organizacional. Las empresas que implementan estrategias innovadoras y fomentan el espíritu emprendedor están mejor posicionadas para evolucionar en un entorno empresarial dinámico. Esto no solo mejora la competitividad, sino que también crea un ambiente donde los empleados se sienten empoderados y motivados para contribuir al éxito de la organización. Aquí quisiera hacer una pequeña diferenciación entre el término innovación y el de emprendimiento. Con frecuencia, al colaborar con las áreas de ingeniería, escucho la expresión “yo me encargo de la innovación del producto y tú de la comercialización”, esta fórmula, aunque definitivamente tiene fundamento, no funciona. Debemos entender que “innovación + comercialización = emprendimiento”; si la innovación se queda sola, sólo será un artículo decorativo en algún museo de historia.
Movilizar una organización puede ser complicado, debemos entender que, para lograrlo, el propósito y esfuerzo de un ser humano debe ser tan inspirador que lleve a mover a una cultura. Todo parte de ahí, al centro de todo el ser humano, le sigue el impacto en el crecimiento corporativo y como consecuencia la evolución de la cultura organizacional.
4.-El Rol de los Jóvenes Ejecutivos
Como jóvenes ejecutivos, tienen el poder de ser agentes de cambio. Su curiosidad y disposición para explorar nuevas ideas son activos invaluables. Adoptar una mentalidad de innovación y emprendimiento no solo impactará sus carreras, sino que también transformará los modelos de negocio de las empresas para las que trabajan. Comprendan por favor el “Viaje del héroe” sugerido por Joseph Campbell, ¡vívanlo para poder comprenderlo!
En el proceso natural de la vida, encontrarán cientos de barreras (principalmente paradigmas obsoletos de otras personas) que les digan “eso es imposible”, contesten con seguridad “no me digas que no se puede hacer, dime como si”. Sean resilientes y comprometidos con su propósito superior; recuerden los primeros dos hábitos sugeridos por Stephen Covey: 1) sean proactivos, 2) empiecen con el fin en mente.
Hasta el día de hoy, la juventud ha sido la rebelde, la que ha logrado grandes cambios en la humanidad, esperemos que esa siga siendo la dinámica, al fin y al cabo, el futuro es de ustedes.
5.-El Futuro es Ahora
La innovación y el emprendimiento son más que conceptos; son pilares fundamentales para el crecimiento y la evolución en la economía digital. Al adoptar estos principios, los jóvenes ejecutivos tienen la oportunidad de ser protagonistas en la creación de un futuro donde las organizaciones no solo sobreviven, sino que prosperan. La invitación es clara: conviertan los desafíos en oportunidades y sean los arquitectos de un nuevo paradigma empresarial. Para esto “la menor buena acción es infinitamente mejor que la mayor de las buenas intenciones. Sin acción no hay movimiento”.
Recuerden, cada idea innovadora que surja de su mente puede ser el próximo gran avance en el mundo empresarial. La economía digital les pertenece, y es su momento de brillar. ¡Adelante, líderes del futuro!