Aseguran que el sistema de filtración de aire de los aviones funciona mejor que el de cualquier otro lugar cerrado

23 de octubre de 2020, 12:05 PM
23 de octubre de 2020, 12:05 PM

Los viajes son uno de los anhelos más grandes de miles de personas de todo el mundo que aún son precavidas por temor a contagiarse de coronavirus en el avión. Sin embargo, expertos de dos instituciones estadounidenses aportan esperanzas de volver a alzar vuelo

Según el medio El Periódico Digital, especialistas de la Asociación Médica Aeroespacial de Alexandría en Virginia (Estados Unidos) sostiene que "el riesgo de contraer el coronavirus durante un viaje aéreo es menor que en un edificio de oficinas, aula, supermercado o tren de cercanías".

La investigación sostiene que el aire ingresa a la cabina desde las entradas aéreas y fluye hacia las salidas a nivel del piso. Además, el aire entra y sale de la cabina en la misma fila de asientos o filas cercanas. "Hay relativamente poco flujo de aire hacia adelante y hacia atrás entre las filas, por lo que es menos probable que se propaguen las partículas respiratorias entre las filas", señala.

Resalta que el flujo de aire en los aviones es mucho más rápido que en los edificios interiores normales. La mitad es aire fresco del exterior y la otra mitad se recicla a través de filtros HEPA del mismo tipo que se utilizan en los quirófanos.

Sin embargo, insisten en las reglas de seguridad que los viajeros deben practicar, como usar barbijo, mantener la distancia física, desinfectar las superficies y lavarse las manos a menudo.

De igual manera, el Departamento de Defensa de Estados Unidos, reportó a la agencia Reuters que "el riesgo de contagio de coronavirus a bordo de aviones durante los vuelos es muy bajo, "casi inexistente", muy inferior al 0,1%, según los hallazgos de diversos estudios

"Cuando un pasajero en su asiento usa una mascarilla, solo un promedio del 0,003% de las partículas de aire dentro de la zona de respiración, alrededor de su cabeza, son infecciosas, incluso cuando todos los asientos están ocupados", concluye la investigación.

El estudio, que fue realizado a bordo de aviones modelos Boeing 777 y 767 de United Airlines, mostró que las mascarillas ayudaban a minimizar la exposición a infecciones cuando alguien tosía, incluso en los asientos vecinos.

Aproximadamente el 99,99% de las partículas fue filtrado fuera de la cabina en 6 minutos debido a la rápida circulación de aire, la ventilación de aire hacia abajo y los sistemas de filtración de la aeronave.

Asimismo, las pruebas realizadas indican que, para recibir una dosis infecciosa, un pasajero necesitaría volar 54 horas continuas en un avión con una persona infectada.

La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) indica que si bien "nada está completamente libre de riesgos", los casos reportados de posible transmisión de COVID-19 durante el vuelo muestran que "el riesgo de contraer el virus a bordo parece estar en la misma categoría que el de ser alcanzado por un rayo", concluyó Alexandre de Juniac, director general y CEO de IATA.

Tomar en cuenta 

Una recomendación muy importante es que los pasajeros de aviones no lleven mascarillas con ventilación para exhalar, ya que permiten el flujo del propio aliento sin filtro. El profesor Tomas Jelinek del Centro para la Medicina de Viajes (CRM) de Berlín recomienda barbijos de tela o de papel, pero bien asegurados.