El tenista cruceño, que se prepara en Argentina, empieza a destacar en el ámbito internacional. Ya ganó un J300, y ahora va por más. "Mi sueño siempre fue llegar a lo más alto", mencionó Juan Carlos Prado en conversación con DIEZ.

10 de abril de 2023, 13:23 PM
10 de abril de 2023, 13:23 PM

Juan Carlos Prado asoma en el tenis boliviano. Como en su momento el paceño Mario Martínez, después el beniano Hugo Dellien, hoy, Prado empieza a destacar entre los nacionales.

Con 18 años recién cumplidos disfrutó de algunos éxitos internacionales, como el último logrado hace unos días en el Club de Tenis Santa Cruz, en el torneo juvenil J300.

También ganó títulos nacionales en La Paz, Cochabamba, Sucre, Santa Cruz y Tarija. En 2017 arrancó su experiencia internacional en Asunción (Paraguay). En la actualidad ocupa el 8º puesto en el ranking de la ITF.

No tuvo influencia familiar para dedicarse al tenis; simplemente había una cancha en el condominio que vivía, un profesor lo orientó y empezó su historia. “Al principio lo tomé como un deporte más, pero después empezó a ser más serio. Mi sueño siempre fue llegar a lo más alto”, confiesa.

Hoy, el tenis está por encima de todo, es su presente y es lo que quiere hacer en su vida. Por ello comparte su vida entre la ciudad de Santa Cruz y el gran Buenos Aires, en busca de mejorar cada día, pretendiendo alcanzar un nivel competitivo que le permita seguir cosechando éxitos.

Juan Carlos se autodefine como un tenista de estilo muy agresivo, que no tiene  ninguna inclinación por determinado terreno para jugar, aunque siente mayor comodidad cuando le toca desempeñarse en canchas de polvo de ladrillo.

Una de las referencias que tiene en el tenis es el trinitario Hugo Dellien. “Es un ejemplo a seguir para todos los chicos de Bolivia, todo lo que logró es increíble, me gusta mucho su actitud y su derecha”, sostiene, aunque a la hora de elegir a una figura internacional se queda con el suizo Roger Federer, por su estilo, firmeza en el juego y otros atributos que Prado destaca.

Para cumplir sus objetivos, Juan Carlos pasa no menos de 7 horas diarias entrenando, entre lo físico y lo técnico, en cancha y con raqueta, con un equipo completo que lo respalda y lo conduce.

Prado cuenta con algunas empresas que lo respaldan, además del apoyo incondicional de sus padres, como normalmente les ocurre con los deportistas
bolivianos que tienen pretensiones o logran llegar a torneos internacionales.

Ha comenzado a participar de algunos torneos profesionales en los cuales recibe algunos recursos económicos.

En base a talento, entusiasmo y determinación, el cruceño empieza a transitar un camino que anima a cualquiera. Ganó un torneo internacional superando la presión de ser el favorito en su propia casa. De esa manera, Prado se convirtió en el futuro del tenis nacional.