Zverev, finalista del Grand Slam de Nueva York en 2020, será el rival en los cuartos de final del vigente campeón, el español Carlos Alcaraz.

5 de septiembre de 2023, 7:23 AM
5 de septiembre de 2023, 7:23 AM

El tenista alemán Alexander Zverev se impuso a Jannik Sinner en un dramático duelo nocturno de cuatro horas y 40 minutos en los octavos de final del Abierto de Estados Unidos, que el italiano jugó con visibles problemas físicos.

A las 01H39 de la madrugada de Nueva York, un exhausto Zverev cantó victoria por 6-4, 3-6, 6-2, 4-6 y 6-3 en el partido más largo de esta edición del torneo, que Sinner se negó a abandonar a pesar de sufrir dolores en ambas piernas.

El italiano aspiraba a citarse de nuevo con Alcaraz en unos cuartos de Nueva York y tomarse revancha de su derrota de 2022, uno de los partidos más recordados de los últimos años que concluyó cerca de las tres de la madrugada.

En cambio, el prometedor jugador italiano encajó otra amarga derrota en cinco sets en la madrugada neoyorquina y tendrá que seguir persiguiendo su primera final de Grand Slam. 

"Mi partido más largo aquí. Supongo que puedo decir que estoy de vuelta", dijo en la pista Zverev, quien el año pasado sufrió una grave de lesión de tobillo en Roland Garros. 

"Esto es para lo que vivo, lo que adoro hacer. Me hubiera gustado jugar un poco menos pero estos son los momentos que eché en falta el año pasado", aseguró. "Es uno de los mejores momentos de mi carrera".

- "La frase de Hitler" -

En unas condiciones de extrema humedad, Sinner y Zverev libraron un vibrante primer set que el alemán se adjudicó después de 70 minutos.

Al inicio del segundo Sinner tuvo que recibir una primera atención médica en la pierna izquierda.

El reciente campeón del Masters 1000 de Toronto, de 22 años, logró adjudicarse la segunda manga antes de sufrir problemas también en la pierna derecha.  

En el tercer set resistió de forma épica hasta cinco pelotas de quiebre pero en el sexto juego Zverev le rompió el servicio y se avanzó 4-2 ante un Sinner que apenas podía caminar entre puntos.

Con 5-2 en contra, el italiano se tapó frustrado la cabeza con una toalla en el banco pero regresó a la cancha dispuesto a seguir peleando.

Zverev se hizo con el tercer set y Sinner, en lugar de retirarse, pidió de nuevo la ayuda del fisioterapeuta.

Al inicio de la cuarta manga, el espigado tenista italiano comenzaba a moverse mejor y, con la grada empujando a su favor, resistía en el marcador apoyándose en su potente servicio.

El juego vivió un momento insólito cuando Zverev denunció al juez de silla que un aficionado gritó "la frase más famosa de Hitler". Tras unos minutos de búsqueda la seguridad de la cancha retiró a un espectador de una de las primeras filas entre aplausos del resto de la grada.

Un Sinner revitalizado comenzó a atacar la moral de Zverev ganando puntos espectaculares y puso en pie a los aficionados al alargar la noche hasta el set de desempate.

Al alemán, sin embargo, todavía le quedaba una reserva de energía y encontró un quiebre temprano para tomar una distancia de seguridad de 4-1 que Sinner ya no logró remontar.

"Estoy aquí para jugar", dijo Zverev sobre el duelo del miércoles ante Alcaraz. "Por supuesto me tengo que recuperar de este partido tan físico, pero estaré listo".