La masa madre es un organismo vivo que debe ser cuidado y alimentado casi como un ser humano. Se utiliza desde hace miles de años en la elaboración de panes y se obtiene a través de la fermentación de harina de granos, como trigo, cebada o centeno.

6 de diciembre de 2021, 7:29 AM
6 de diciembre de 2021, 7:29 AM

La masa madre es un organismo vivo que debe ser cuidado y alimentado casi como un ser humano. Se utiliza desde hace miles de años en la elaboración de panes y se obtiene a través de la fermentación de harina de granos, como trigo, cebada o centeno.

Este ingrediente posee una microflora hecha de levaduras y bacterias que brinda al pan su característico sabor, olor y textura en la miga, además permite preservar el pan por más tiempo. Obtenerla puede demorar entre cinco y seis días, pero su preparación es sencilla y requiere el mínimo de atención. Solo se necesita agua y harina en partes iguales y un poco de azúcar.

Pero, ¿qué función cumple en los panes? Esta mezcla es usada como ingrediente principal en la elaboración de panes artesanales porque sustituye a la levadura tradicional, dando como resultado panes más suaves y deliciosos. La masa madre posee muchos nutrientes. Entre ellos se encuentran las vitaminas B1 a B6, B12, folato, tiamina, niacina, riboflavina, vitamina E, hierro, magnesio, calcio, fósforo, zinc y potasio. Además, también tiene un increíble balance de proteínas y ácidos grasos. Otra buena noticia es que, a diferencia de los panes industriales, los panes que se preparan con esta masa son de bajo índice glucémico.

Para saber más

  • Como dijimos anteriormente se pueden usar las harinas de granos como trigo, cebada o centeno. Y en realidad cualquier harina integral, ya que las levaduras viven, principalmente, en la cáscara de los cereales, algo que no contienen las harinas refinadas.
  • El agua de grifo contiene bastante cloro, algo que podría afectar en el proceso de fermentación de la masa. Lo aconsejable es usar agua mineral a temperatura ambiente. Caso contrario agua hervida que deberá estar templada.
  • Demora cinco días precisamente para lograr una fermentación óptima, durante esos días solo habrá que alimentarla con un poco más de harina, agua y azúcar. La masa debe conservarse en un recipiente grande (preferentemente de vidrio) para que pueda seguir creciendo.