Según los expertos, el secreto radica en el adobo y el tiempo en el que se marina la carne

12 de diciembre de 2022, 8:30 AM
12 de diciembre de 2022, 8:30 AM

Entre los platos más emblemáticos y más consumidos durante las fiestas de fin de año por la gente está el chancho relleno. Es por ello, que dos expertos brindan sus mejores tips para que lo puedan preparar en casa para esta Navidad o Año Nuevo. 

Fernando Sotelo y Virginia Escobar, ambos chef, coinciden al afirmar que lo que determina la sazón del lechón relleno es el tiempo en que se marina la carne y el adobo que se utiliza. "Además, lógicamente, del relleno que se elija", subrayó Sotelo. 

Escobar dice que el lechó no debe exceder los 15 kilogramos, "Si pasa de eso, no hay garantía de que su carne sea tierna; todo lo contrario, es muy probable de que sea un animal adulto, que debe ser despresado para cocer bien", dijo. 

Segundo, explicó Sotelo, se debe marinar en sal y agua por lo menos seis horas. "Esto ayuda a permear la sal en cortes más gruesos como el lomo, piernas o brazos". 

Tercero, los expertos en cocina explicaron que el adobo se realiza a base de ajo, comino, pimienta, canela, ají colorado, hierba buena, salsa soya y vinagre. "Todo esto se licúa y se empapa todo el lechón, desde las orejas hasta la cola. Con esto debe reposar unas cuatro horas", indicó Sotelo. 

Cuarto, cuando haya pasado el tiempo indicado, recién se puede rellenar. "Algunos eligen arroz con pollo y uvas pasas. Otros prefieren arroz con costillas de cerdo ahumadas, hay quienes eligen solo verduras", aseguró Escobar. 

Quinto, antes de meter al horno, se debe envolver las orejas del lechón con papel aluminio. "Puesto que se trata de un cartílago, se cocina rápido y termina quemándose, por eso se la envuelve. Al resto del lechón se le impregna mantequilla", sostuvo Escobar. 

"El lechón tiene un tiempo de cocción promedio, ese bordea las cuatro horas, a fuego medio. Durante ese tiempo, se debe bañar la carne cada media hora con el mismo jugo del adobo que cae en el recipiente que se hornea", aconsejó Sotelo. 

Una vez se note la piel del lechón cocida, se retira del horno y se sirve. ¡Buen provecho!