El presidente de Estado, Luis Arce, durante su discurso por el Aniversario Patrio del 6 de agosto, anunció la liberación, a precio internacional, de dos tipos de gasolinas, que se cotizarán de acuerdo con los precios internacionales del petróleo.

“Una de las primeras acciones que tomaremos es fomentar el consumo de la gasolina Premium Plus existente en el país, con un nuevo precio de 5,71 bolivianos y que sufrirá modificaciones de acuerdo con las variaciones del precio internacional del petróleo”, anunció el jefe de Estado durante su discurso en la Sesión de Honor realizada la mañana de este martes en la Casa de la Libertad, en la ciudad de Sucre.

Anunció también que se introducirá al mercado una nueva gasolina de “alto octanaje”, la Ultra Premium 100, que tendrá un precio de Bs 6,71, pero este oscilará también de acuerdo a la variación del precio internacional del petróleo.

Las medidas fueron adoptadas ante la constante problemática del desabastecimiento de combustibles y que en 2023 significaron una erogación para el Estado, de $us 1.821 millones para comprar diésel y $us 1.026 millones para comprar gasolina en los mercados internacionales, según datos del Instituto Nacional de Estadística.

Según el mandatario, estas decisiones fomentarán el consumo de la gasolina con mayor octanaje

“Ambas gasolinas tienen excelentes características, que mejorarán el rendimiento de los motores y proporcionarán mayor potencia. La diferencia en el rendimiento de los vehículos al incrementar su octanaje será considerable y se recorrerá una mayor cantidad de kilómetros con una menor cantidad de combustible, posibilitando un ahorro al comprador”, explicó Arce.

Aclaró que los precios actuales de la gasolina Especial y del diésel se mantendrán. “Sepa el pueblo boliviano que mantendremos los actuales precios de la gasolina especial y del diésel; por tanto, esta medida no afectará a los sectores populares y de menores ingresos”, remarcó.

Anunció también la realización de un referéndum, junto con las Elecciones Judiciales, sobre la continuidad de la subvención a los hidrocarburos.

Bolivia mantiene congelados los precios de los combustibles desde hace 19 años, algo que desde el Gobierno de Evo Morales, se trató de evitar por los conflictos sociales que a menudo acarrea.

Precisamente, el 26 de diciembre de 2010, Evo Morales dispuso un “gasolinazo”, que tuvo que revertir en días posteriores. El decreto aumentaba hasta en 83% el precio de los combustibles.

Lea también

PAÍS

Luis Arce anuncia referéndum para definir temas económicos y políticos

Arce promete analizar problemas económicos, como el tipo de cambio de divisas