Aproximadamente 1.000 efectivos de las Fuerzas Armadas (FFAA) han sido incorporados al control de combustibles esto con el objetivo de garantizar el suministro de diésel y gasolina en el mercado interno, reportan medios estatales.
El despliegue de los uniformados incluirá la custodia de cisternas que transportan combustibles, acompañándolas hasta su destino final. Además, estos equipos seguirán ejerciendo control en las estaciones de servicio para asegurar que la distribución de combustibles llegue a los consumidores.
En los últimos días, el incremento de la demanda de combustibles generó la formación de filas en surtidores de algunas ciudades del país. Sin embargo, el director Ejecutivo de la ANH, Germán Jiménez, aseguró que el flujo de importación, transporte y distribución se mantiene estable y no existen problemas en el suministro.
En el marco de los decretos 4910 y 4911, la ANH desarrolla un plan integral que incluye el abastecimiento ininterrumpido de combustibles en estaciones estratégicas de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, Potosí y Oruro, junto con patrullajes reforzados en zonas críticas, estableciendo cinco puntos de control en Santa Cruz, cuatro en La Paz y dos en Cochabamba.
Además, se activarán mensajes de alerta para detectar carguíos irregulares, y se realizará un control in situ para identificar vehículos clonados y tanques adicionales. Todo esto será complementado con una sala de monitoreo que permitirá la vigilancia en tiempo real de la distribución de combustibles.
De acuerdo con el Gobierno estas acciones buscan superar problemas estructurales, como la limitada producción de crudo y líquidos derivados. Entretanto se avanza en soluciones a largo plazo como la industrialización de biocombustibles y la exploración de hidrocarburos.
Por otro lado, a través de un reporte del Ministerio de Hidrocarburos y Energías, recordaron que se implementaron acciones como la introducción de nuevas gasolinas y el Plan Soberanía para combatir el contrabando de combustibles.