Es crucial que, en cualquier diagnóstico gubernamental, se incluya información económica relevante y actualizada que ha estado ausente en los últimos meses, ya que es esencial para la toma de decisiones informadas. Entre los indicadores que deben ser considerados y socializados se encuentran:

Reservas Internacionales Netas. Es un dato vital cuya última actualización conocida se remonta al informe cuatrimestral de abril de 2024, presentado por el presidente del Banco Central de Bolivia, Edwin Rojas.

Déficit fiscal. El dato que se tiene correspondiente a 2023, cuya publicación final, esperada para marzo de este año, es crítica para evaluar la salud fiscal del país. También es necesario conocer detalles sobre las finanzas públicas en 2024.

Fuentes de financiamiento. Este indicador es importante para poder entender el desequilibrio fiscal, donde se debe esclarecer si el Gobierno ha recurrido a deuda interna o externa. En caso de ser deuda interna, es importante saber si los recursos provinieron de préstamos directos del Banco Central al Tesoro General de la Nación o de la colocación de bonos en el sistema financiero, principalmente a través de la Gestora Pública de Pensiones.

Reservar hidrocarburiferas. Se necesita tener un informe detallado sobre las reservas probadas y probables, los proyectos de exploración y su grado de éxito, así como los niveles de utilización de la capacidad productiva instalada.

Carlos Aranda, economista de Populi, señaló que estos datos no solo son relevantes para el análisis actual, sino que también es crucial para el diseño de políticas públicas efectivas.

“Si esta información ha sido revelada en el diagnóstico gubernamental, su socialización al conjunto de la población es igualmente importante para asegurar la transparencia y fomentar un debate informado sobre las soluciones necesarias para superar los desafíos económicos que enfrenta el país”, puntualizó Aranda.

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