“No hay micros”, es la queja de los usuarios del transporte público que padecen la escasez de este servicio, que opera con entre el 20% y 30% de sus unidades debido a la falta de combustible. A esto se suma que otros servicios, como la recolección de basura, el mantenimiento de calles y los operativos de seguridad ciudadana, están al 50% por el mismo motivo. 

Silvana, que acude todos los días a la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, señala que por lo general espera cinco minutos el paso de un micro, pero ahora lo mínimo que tiene que aguardar son 15 minutos o más, aunque señala que tiene la ventaja de elegir varias líneas que pasan por la avenida Cristo Redentor para llegar hasta el segundo anillo y  también hay trufis que la acercan hasta su destino. “Cómo la pasarán las personas que viven en zonas donde opera una sola línea”, señala.

Y  la situación para la ciudadanía se pone cada vez más complicada, porque en la desesperación a veces tienen que tomar taxi, pero su presupuesto tampoco alcanza.

Florencia trabaja de cocinera en un restaurante y ayer tuvo que tomar un taxi para llegar a tiempo, pero ese gasto extra le afecta a su presupuesto familiar, siendo que ella tiene tres hijos a su cargo.

Susana, maestra de primaria, salió de su casa una hora antes de lo habitual para asegurarse de llegar a tiempo a su trabajo. Sabe que los micros son escasos y que el tiempo de espera en las paradas es más largo de lo normal, por lo que no quiso arriesgarse a llegar tarde. 

“Desde la semana pasada venimos sufriendo la falta de micros, los pocos que circulan pasan llenos, y al parecer esta semana será peor porque las colas en los surtidores son cada vez más largas”, señaló.

Segundino Ricaldi, dirigente del transporte público, afirmó que la situación es cada vez más complicada y que este lunes solo entre 20% y 30% de los micros salió a prestar el servicio porque el resto está haciendo fila en los surtidores. 

“Los choferes están durmiendo en los surtidores desde el viernes. Siguen las colas, no hay diésel, si antes teníamos al 50% de las unidades operando ahora no llegamos ni al 20% o 30%”, lamentó.

En la ciudad operan unos 10.000 micros y la mayoría de las unidades funciona a diésel, por lo que la falta de combustible afecta directamente al servicio.

Ricaldi señaló que no descartan movilizaciones, pues hay familias afectadas que no están logrando generar ingresos económicos y el usuario también está siendo perjudicado. “Vamos a tener que juntarnos con todos los sindicatos y las cooperativas, y salir a bloquear para hacernos sentir de alguna forma”, advirtió.

“Un día trabajamos y al día siguiente estamos en las colas. La impotencia es grande, no podemos trabajar y tenemos que llevar el sustento a nuestras familias”, señaló uno de los choferes que llevaba horas en la fila.

En Concepción los motataxistas decidieron subir el costo del pasaje a Bs 4.

Servicios a medias

Por su parte, el Gobierno Municipal informó este lunes que los servicios de recolección de basura, mantenimiento de calles y los operativos de seguridad ciudadana están funcionando al 50% debido a la escasez de diésel.

La Alcaldía emitió un comunicado apelando a la comprensión de la población y asegurando que se están realizando gestiones para retomar la normalidad en los servicios. 

“Ante la escasez de diésel, los servicios de recojo de basura, mantenimiento de calles y grupos operativos de seguridad ciudadana no están cumpliendo a cabalidad los trabajos programados, ya que están reducidos hasta un 50%, situación que escapa de nuestras manos”, dice parte del comunicado.

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