El artículo 17 de la Resolución Ministerial 0001/2023 del Subsistema de Educación Regular establece que el descanso pedagógico se llevará adelante desde la primera semana de julio, y prohíbe asignar tareas a los estudiantes.

Este año, las vacaciones de invierno están agendadas entre el 3 y el 17 de julio, y aunque los maestros creen que después los estudiantes retornan prácticamente “en las nubes”, concuerdan con que está bien que descansen.

Mery Ana Cuiza, directora del Colegio Roca y Coronado, opinó que los estudiantes necesitan ese espacio para retraerse de las actividades escolares, y concentrarse en el esparcimiento, ya sea en familia, etc., pero cree que esto no debería ser luz verde para que hagan lo que quieran. 

“Como sugerencia, el maestro puede darles que lean algo que les agrade, o que escriban un diario personal para que den a conocer algunas experiencias nuevas el retornar. Así, al mismo tiempo se trabaja lectura, escritura, y más que todo la expresión. Son opciones que estamos viendo dentro de la unidad educativa, pero hemos prohibido las tareas rotundamente”, explicó.

También recordó a los padres que se trata de dos semanas de ‘full time’ con sus hijos, y que es importante delegarles tareas en el hogar, o inscribirlos en cursos extracurriculares, deportivos, etc., para que no se cuelguen de la ‘niñera artificial’, la tele o el celular.

Sugirió a las juntas escolares y vecinales que promuevan espacios para el arte, la cultura y el deporte por estas dos semanas, y que gestionen, quizás a través de las cooperativas de servicios básicos, proyectos para sus niños.

Según Cuiza, lo más recomendable es que las actividades sean gratuitas, ya que al menos entre sus estudiantes, provienen de hogares de comerciantes informales, que a menudo pasan sus vacaciones haciendo venta ambulante, porque no se enteran de las opciones disponibles para las vacaciones.

Alejandra Choque es directora del Colegio Gabriel René Moreno, observó que el concepto de tarea que “comprendemos es como una acción de cumplimiento o carga estresante”, y basándose en los términos “descanso pedagógico”, no está bien que se asignen tareas como actividades estresantes.

Sin embargo, dijo que existe la opción de dar actividades lúdicas que sean del agrado de los estudiantes, y que de alguna manera ayuden al crecimiento personal, “como por ejemplo escribir un poema, visitar un parque y hacer un análisis crítico - reflexivo, ver y analizar una película de valores”, dijo.

Reconoció que ocurre que algunos estudiantes regresen a clases desconectados, pero dijo que no ocurre en todos los casos, y que mucho depende del interés del estudiante o de la familia.

Choque recordó a los progenitores y/o tutores que el peligro de que los chicos adquieran malos hábitos o vicios está en el tiempo de ocio, y que por esa misma razón este tiempo libre debe ir acompañado con actividades que alimenten el crecimiento personal. 

“Llegan totalmente en las nubes”, confesó Tania Montero, maestra de colegios fiscal y privado, pero a pesar de eso cree que no debe asignarse tareas a los escolares en su descanso pedagógico para que se desconecten. Eso sí, también pidió a los padres darles tareas en el hogar.

Osmar Cabrera, ejecutivo del Magisterio Urbano cruceño, reconoció que hay un debate sobre si dar o no tareas, y qué es lo mejor, pero también confesó que muchos alumnos dedican el tiempo a redes sociales y videojuegos, y que los efectos se ven al retornar al colegio, a lo que llamó “un ocio no tan productivo”.

Recomendó que en casa se den responsabilidades que les ejerciten la memoria, para que no queden tan desvinculados del proceso educativo, y los maestros no tengan que “empezar todo prácticamente de cero”.

Sarita Mansilla, secretaria municipal de Cultura, resaltó que las vacaciones son para salir de la rutina, y que una gran opción es hacerlo en un ambiente agradable, como las bibliotecas de barrio, que tendrán actividades recreativas durante el descanso.

PARA SABER

Alcaldía
Tiene actividades en la mayoría de los distritos municipales para el descanso pedagógico, el 90% son gratuitas. Hay ajedrez, dibujo, pintura, instrumentos musicales, juegos didácticos, manualidades, danza, club de lectura, etc.

Juntas vecinales
La profesora Mery Ana Cuiza sugirió a los progenitores que, así como piden cursos para las madres en los barrios, acudan a las cooperativas de servicios básicos con proyectos para que apoyen a los estudiantes en el descanso pedagógico.

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