“Competencias laborales en las empresas bolivianas” es el nombre del estudio presentado por el Observatorio Nacional del Trabajo (ONT) ante personeros del Banco Mundial (BM), en un evento que contó con la participación de diversas instituciones dedicadas a impulsar el empleo joven. El informe identifica las competencias más solicitadas por el sector privado y lo que buscan las empresas en los nuevos trabajadores.

“Ha sido importante presentar este informe, principalmente por la presencia de estas instituciones que trabajan con la temática del empleo en Bolivia, de esta manera se pueden orientar mejor las acciones y generar sinergias en un tema tan relevante para el crecimiento económico boliviano. Lo que se ha mostrado son las diferentes competencias que demandan los colaboradores en los niveles jerárquicos y estratégicos de las empresas en Bolivia y, por ejemplo, entre otras acciones, determinar hacia dónde se tienen que orientar los esfuerzos de capacitación”, explicó Diego Urioste, coordinador de la ONT, institución que forma parte del Centro de Pensamiento Estratégico de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz.

Camille Nuamah, representante residente del Grupo Banco Mundial en Bolivia indicó que este organismo internacional tiene interés en conocer a fondo el tema laboral y sobre todo el empleo joven en el país, ya que, dadas las condiciones de Bolivia, este sector podría convertirse en un motor de desarrollo económico, superando incluso a la explotación de recursos naturales.

“Bolivia es un país que está muy enfocado en el desarrollo basado en los recursos naturales, pero el Banco Mundial, con información sobre el país, entiende que es importante desarrollar la economía por parte del capital humano, ya que esta podría ser una gran fuente de crecimiento, superando al crecimiento –incluso– que se puede lograr con los recursos naturales en el futuro. También es importante porque con esa estrategia se puede trabajar en el bienestar social, la productividad, ingresos de los hogares”, puntualizó.

Patricia Álvarez, oficial de operaciones senior para Desarrollo Humano del Banco Mundial en Bolivia, señaló que el evento tiene como fin conocer diferentes perspectivas respecto a la problemática del empleo joven, sobre todo considerando que esta población representa el 50% en el país y que requiere de acciones específicas para poder explotar todo su potencial.

“Para nosotros es importante el grupo joven entre 18 y 26 años porque Bolivia tiene un 50% de población joven, es una generación que requiere un apoyo especial de parte del empresariado, del Estado y de todos los habitantes del país, no solamente por que son el futuro, sino porque ellos pueden ser un aporte en  innovación, en creatividad para  generar conocimiento, pero también aportar a la producción del país”, expresó.

De la misma manera, resaltó la labor de Unifranz, a través del ONT al  generar datos e información actualizada sobre la temática del empleo en el país.

“Consideramos que el ONT es una institución que está en la avanzada en torno a motivar y trabajar en base a información, en base a un monitoreo de acciones. En esa línea, es importante en el ámbito de la investigación y el trabajo académico, por eso hemos pensado en una alianza”, agregó.

Investigación sobre competencias laborales

La investigación del ONT identificó que en el nivel estratégico de las empresas se valoran, en mayor proporción, las competencias de comunicación efectiva (escrita), resolución de problemas y habilidades de contacto (astucia política). Mientras que las menos valoradas son las de independencia/autonomía, visión del negocio y motivación y delegación.

Por otro lado, a nivel táctico, las competencias más valoradas son las de motivación y delegación, integridad/honestidad y responsabilidad. Mientras que las menos valoradas son las de impacto e influencia, manejo de conflictos y habilidades de contacto.

Actualmente, la ONT se encuentra trabajando en una segunda parte de la investigación, la cual se centra en las competencias requeridas por las empresas en los niveles operativos.

Urioste señaló que conocer lo que requiere el sector empresarial de sus trabajadores permite ajustar la oferta de la academia y cerrar la brecha entre lo que ofrecen las universidades, centros educativos de diversos niveles y lo que demanda el mercado laboral, lo que hace posible ajustar las curriculas educativas y programas de formación, dotando a los jóvenes de mejores herramientas.

“Es importante identificar las competencias laborales más requeridas y que se visibilicen porque existe una desconexión muy grande entre las necesidades del mercado y lo que ofrecen tanto los centros de educación técnica y las universidades, siendo muy importante cerrar esta brecha. Esto se puede lograr mediante procesos de formación, hay que revisar la currícula educativa, cada universidad, cada centro de formación tienen que conocer lo que quiere el mercado y adaptar su oferta académica a lo que necesita”, acotó el coordinador del ONT.

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