ECONOMÍA
Fundación Tierra cuestiona responsabilidad del INRA en el control de predios avasallados
El director de la entidad estatal, Eulogio Núñez, señaló que las disputas por los terrenos saneados pasaran al tribunal agroambiental.
"El Fondo Indígena no ha mejorado la calidad de vida de los guaraníes y de los indígenas de tierras bajas". Celso Padilla, miembro de la Asamblea del Pueblo Guaraní, lo dice con firmeza. Recuerda las luchas de 2005 para que los recursos provenientes del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) llegara, de algún modo, en las comunidades indígenas próximas a los pozos.
Una investigación periodística publicada por EL DEBER en colaboración con Connectas y Verdad con Tinta muestra el seguimiento a este fondo y el despilfarro de más de $us 1.000 millones en obras "que han servido más a los intereses del partido oficialista", recalca el autor Jesús Vargas Villena.
Padilla habló en A Primera Hora, programa emitido por EL DEBER Radio, y recordó la génesis del Fondo Indígena, posteriormente transformado en Fondo Indígena Originario Campesino (Fondioc). También exigió acciones concretas para la "recuperación de la deuda de $us 1.000 millones malversados" y que deben repercutir "en mejorar la calidad de vida de los indígenas guaraníes y de tierras bajas".
Durante la entrevista, Padilla apuntó nombres y responsables sobre este "desfalco de los recursos en favor de los pueblos indígenas". El líder guaraní apunta a Evo Morales, como presidente, a Luis Arce, como ministro de Economía "pues él era quien firmaba cada cheque que salía" y, sobre todo, a Nemesia Achacollo, presidenta del Fondioc entre 2010 y 2013.
En ese periodo, y los posteriores, se transformó la institución. El Gobierno abrió el arco de los beneficiarios para incorporar a las organizaciones pertenecientes al Pacto de Unidad (Csutcb, Bartolina Sisa, Interculturales y Conamaq).
A partir de ahí, "los proyectos de ejecución para tierras bajas eran del 10% de los fondos y el 90% se destinaba al Pacto de Unidad", observa Padilla. Además, y cómo se demostró años después, un buen número de esos proyectos no eran reales. "Los interculturales presentaron 100 proyectos fantasmas. Solo presentaron el nombre del proyecto, sin perfiles, y se les desembolsaron solo con el nombre del proyecto", recuerda.
Es más, en su denuncia resalta que "los municipios masistas accedieron a los recursos de manera directa". Mientras que a otros proyectos no se les entregaba el dinero. Asegura que desde su trabajo como director del Fondo Regional en Santa Cruz (2017) y hasta ahora "no se entregaron recursos, no se aprobaron proyectos en Santa Cruz". Y concluye que "se han llevado los recursos".
Por ello, y con el espíritu de recuperar el origen que dio origen a estos fondos, Padilla demanda "la devolución de esos fondos" y la "recuperación de los recursos malversados para que las regalías beneficien a los guaraníes".
Una revisión de los recursos del FDI revela que ha gastado casi $us 1.000 millones en 20 años y que ha servido más los intereses del oficialismo. El último reporte (2021) revela que el 65% de $us 61 MM fueron enviados a alcaldías donde no hay originarios.