La banda más longeva de la historia del rock no deja de sorprender al público que se le pone enfrente, cada movimiento entre las cuerdas y los dedos de Keith  y Ronnie, la batería de Watts, y la voz del mítico Mick Jagger, con las casi 12 millas recorridas en cada concierto, a sus 74 años, pusieron a bailar a  la capital irlandesa.

El público no fue el de La Plata, mucho menos el de Copacabana o La Havana, sin embargo hubo quienes se movieron al ritmo de cada canción. Fueron poco más de de dos horas de show, cuyo inicio estuvo a cargo de The Academic quienes tuvieron la difícil misión de poner de pie a una audiencia no muy encendida, que esperaba a los 'Stones'.

¡Please allow me to introduce myself! Sus 'satánicas' majestades, arrancaron con Simpathy for the Devil, ante más de 70 mil espectadores con una impecable actuación.

 
 
 
Croke Park, fue el lugar de encuentro, una fiesta en la que más de tres generaciones se reunieron para bailar y festejar. Entre ellos también las hijas del guitarrista Roonie Woods, quien publicó una encantadora foto de sus pequeñas. “My little Rockers!”
 
 

El concierto y la actuación fueron impecables. EL DEBER, fue parte de esta fiesta:

 

En octubre de 2018, lanzarán un libro con los diseños exclusivos elaborados por los integrantes de la banda.

This is THE ROLLING STONES: