La derrota 4-1 el miércoles en el terreno del Manchester City ha disparado las alarmas: el líder Arsenal tiene apenas dos puntos de ventaja sobre los 'Citizens', que tienen además dos partidos disputados menos, por lo que ganar en la 34ª jornada parece una obligación.

El Arsenal recibirá el martes al Chelsea, un equipo perdido en la zona media de la tabla y que encadena derrota tras derrota. Será un derbi lleno de urgencias y con dos equipos que no atraviesan, en absoluto, su mejor momento.

Los 'Gunners' llevan cuatro jornadas sin ganar (tres empates, una derrota) y su amplia ventaja se ha ido reduciendo hasta el punto de que ya no depende de sí mismo para ser campeón y poder reconquistar un título que no consigue desde 2004.

El Manchester City podría incluso ponerse líder simbólicamente, el domingo si gana al Fulham (10º), dos días antes del derbi londinense entre Arsenal y Chelsea.

"Tenemos dos partidos pendientes, pero la realidad hoy es que estamos dos puntos por detrás del Arsenal, así que iremos partido a partido", declaró Guardiola el miércoles, después de la goleada al líder.

En el Emirates Stadium, el Arsenal será en cualquier caso favorito el martes contra un Chelsea que es apenas undécimo en la clasificación y que lleva cinco derrotas seguidas, entre Premier League y Liga de Campeones, donde ha sido apeado en cuartos de final por el Real Madrid.

"No nos vamos a rendir nunca. Nos quedan cinco partidos y todo puede pasar. Tenemos que seguir confiando aunque lo de hoy ha sido duro", admitió el miércoles el entrenador del Arsenal, Mikel Arteta, tras la bofetada sufrida en el Etihad Stadium.

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