Mientras Juan Carlos Prado jugaba la final del Roland Garros Junior en París (Francia), a miles de kilómetros tenía apoyo incondicional. En Bolivia, la familia del tenis y del deporte en general estuvieron pendientes de lo que hacía el cruceño en uno de los torneos más importantes del mundo.

Específicamente en el Urubó Lawn Tennis Club de Santa Cruz, Prado gozó de mucho apoyo, pues es el club donde se prepara para sus diferentes campeonatos en los que participa.

Entrenadores y algunos deportistas madrugaron para seguir juntos el partido de ‘Joao’, como le dicen en el club. Con impaciencia miraban pasar el tiempo, porque el inicio se retrasó 50 minutos, estaba previsto para las 6:30 (HB), pero finalmente comenzó a las 7:20.

Su primer entrenador Carlos Cáceres, Alejandro Mendoza, el preparador físico Javier Villanueva y algunos tenistas le mandaban buenas vibras a Juan Carlos durante el juego.

“Cuando está en Santa Cruz, Juan Carlos se entrena como mínimo seis horas por día. Hace dos turnos para trabajar la parte física y también en su tenis”, comentó Mendoza, quien hace un par de meses dejó de competir oficialmente y ahora ayuda en la preparación de ‘Joao’.

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Tiene 18 años y práctica este deporte desde hace una década. Su entrenador es Germán Ritter y se entrena en el Urubó Lawn Tennis Club

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