La participación del relator país y miembro de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Joel Hernández, en el acto de desagravio a los vocales que organizaron las fallidas elecciones de 2019 causó molestia y fuertes críticas de diversos sectores de la oposición y el oficialismo. El Conade declaró al comisionado persona no grata, Creemos y Comunidad Ciudadana pidieron informes a la OEA y hasta acusaron a Hernández de ser un enviado del gobierno mexicano dirigido por Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

“El comisionado Joel Hernández, todos sabemos que es un enviado de Juan Manuel López Obrador, presidente de México, para hacer esta opereta, puesta en escena, esta mentira para hacerle creer al pueblo boliviano que toda la OEA se ha dado la vuelta en su postura y le ha dado la espalda al pueblo boliviano que creemos absolutamente falso”, sostuvo el diputado de Comunidad Ciudadana Juan Manuel Ormachea.

El legislador informó que enviará una carta al secretario general de la Organización de Estado Americanos (OEA) para pedir que ratifique su postura de no reconocimiento a las elecciones generales de hace cuatro años.

El exembajador de Bolivia ante la OEA, Jaime Aparicio, coincidió con el diputado opositor y dijo que el comisionado recibe instrucciones del gobierno mexicano. “(Joel Hernández) ocasiona un profundo daño a la credibilidad @CIDH, contradice auditoría OEA/UE y USA, para afectar a @Almagro_OEA2015 y proteger a empresa mexicana cercana a AMLO, que organizó fraude electoral en Bolivia”, escribió Aparicio.

El lunes, el Ministerio de Justicia organizó un acto de desagravio en favor de ex vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que fueron detenidos e investigados por el caso de supuesto fraude en los comicios de 2019. Las elecciones de octubre de ese año fueron anuladas luego que la auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) hallara “manipulación dolosa” en actas y en procesamiento de resultados.

El expresidente Jorge Tuto Quiroga recordó al visitante internacional los sucesos de 2019: “El comisionado Joel Hernández de la decadente y vergonzosa CIDH: 10-Nov-19, el expresidente Morales, después de recibir auditoría electoral de la OEA que él mismo exigió, anunció que anulaba las elecciones -por el fraude- y destituyó a las autoridades electorales del TSE en Bolivia”, tuiteó el exmandatario.

Mientras, el diputado oficialista Héctor Arce consideró que la participación del comisionado en el acto de desagravio “no fue saludable” ya que la CIDH se encuentra haciendo una observación a los derechos humanos en el país.

Por su parte, el Comité de Defensa de la Democracia (Conade) declaró como “persona no grata” al relator y anunciaron protestas porque desconfían en el informe que pueda emitir la CIDH si el aludido continúa como miembro.

El Conade declara persona no grata a Joel Hernández y solicita a la CIDH que sea separado como Comisionado en Bolivia e integrante de la CIDH”, detalla parte de la misiva.

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