El presidente Luis Arce afirmó este lunes que no teme que la “derecha golpista y asesina” atente contra su vida, tras denunciarse que el grupo que mató al presidente de Haití, Jovenel Moïse, estuvo en el país durante las elecciones de 2020.

Durante la Cumbre Nacional para la Reconstrucción Económica y Productiva de Bolivia, realizada en La Paz, el jefe de Estado aprovechó para festejar su primer año en el poder, recordando cómo el MAS ganó las elecciones.

“Ese día, recordará nuestro hermano David Choquehuanca, la casa de campaña donde estábamos fue rodeada de policías, inclusive tanquetas y vehículos para transportarnos directamente a la cárcel, porque ellos pensaban que íbamos a perder, hasta el último momento seguían pensando cómo hacer fraude, quitarle legitimidad al voto en las urnas”, afirmó el mandatario.

Denunció que “la derecha golpista, que hoy quiere impunidad, pretendía nuestras cabezas, y fue el pueblo boliviano, con su voto, quien reconoció que la derecha no representa sus intereses, por eso ganamos con el 55% las elecciones en octubre pasado”.

El discurso:

Esta jornada el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, denunció un intento de magnicidio contra Arce, coordinado por el exministro de Defensa, Fernando López. Apuntó a colombianos y opositores venezolanos que también habrían operado en Haití en julio pasado.

“Quisieron atentar contra nuestra vida, pero a la derecha golpista, asesina, les vamos a responder con una frase de Marcelo Quiroga Santa Cruz, que cuando era diputado y hacía el juicio contra Hugo Bánzer, y recibía amenazas de muerte, él respondía ‘sabemos que más pronto que tarde se cobrarán esto que estamos haciendo. Estamos dispuestos a pagar ese precio. ¡Siempre estuvimos dispuestos! ¡Jamás vamos a rehuir el peligro!, porque mucho más temible que ese enemigo que está buscando la manera de anularnos, aun físicamente, es una conciencia culpable y no podríamos soportarnos a nosotros mismos’, no tenemos miedo”, remarcó.

Lea también