Bolivia elegirá en las elecciones judiciales este domingo a 19 de los 26 jueces de los altos tribunales del país, debido a la decisión constitucional que declaró desierta la convocatoria en algunas regiones bolivianas, dejando pendiente la votación de 7 cargos para futuros comicios.

El vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Francisco Vargas, declaró a los medios internacionales, entre ellos EFE, que de los 26 magistrados únicamente se van a "elegir y acreditar a 19 autoridades titulares y suplentes".

"Hemos asumido una postura de respetar el Estado de derecho, respetar la Constitución y llevar adelante esta elección cumpliendo los fallos que ha emitido el Tribunal Constitucional pese que a muchos no nos gusta y no nos parece, (porque) debiera ser una elección total", indicó.

Más de 7,3 millones de votantes asistirán alas urnas en Bolivia para elegir a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ, Tribunal Constitucional (TCP), Tribunal Agroambiental y Consejo de la Magistratura.

Los comicios se efectuarán de forma completa tan solo en La Paz, Oruro, Potosí y Chuquisaca, que son cuatro de las nueve regiones del país.

Mientras que en los departamentos de Beni, Pando, Cochabamba, Tarija y Santa Cruz no podrán votar por los candidatos al TCP, asimismo en Beni y Pando tampoco se elegirán a los magistrados del TSJ.

Vargas resaltó que la decisión de realizar los comicios judiciales parcialmente fue para evitar "romper" el Estado de derecho y que se generen "complicaciones" en el sistema democrático boliviano.

El ente electoral habilitó 5.597 recintos de votación en los nueve departamentos del país y 33.019 mesas de sufragio, mismas que estarán custodiadas por 8.084 notarios electorales, cada uno a cargo de ocho mesas.

El vicepresidente del TSE precisó que "quedan en carrera 94 candidatos", puesto que desde el momento en que el Legislativo envió la lista de postulantes al ente electoral se produjeron 12 renuncias voluntarias y el deceso de un candidato.

También quedaron inhabilitados cuatro postulantes por no renunciar a sus cargos de jueces faltando tres meses para la elección judicial, como establecen las reglas del proceso.

Los comicios judiciales se realizarán con un año de retraso debido a las diferencias que hubo entre el oficialismo y la oposición además de los constantes recursos judiciales que se presentaron los postulantes que quedaron fuera de la selección parlamentaria.

A finales de 2023, los magistrados del TCP ampliaron su mandato y el de los jueces de los demás tribunales bajo el argumento de evitar un "vacío de poder" hasta que se realicen nuevas elecciones.

Esa polémica decisión generó la protesta de la oposición y de los seguidores del expresidente Evo Morales (2006-2019), quienes realizaron un bloqueo de caminos de 11 días para pedir la renuncia de los jueces "autoprorrogados".

La Constitución boliviana vigente desde 2009 establece la elección por voto popular de los magistrados de los principales tribunales del país, previamente seleccionados por el Legislativo, para un mandato de seis años.

En las elecciones judiciales de 2011 y 2017 la mayoría de electores votó nulo o en blanco en rechazo a los procesos, al considerarlos manipulados por la mayoría legislativa del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS).