Ver al expresidente Evo Morales como chofer de un microbús, cobrando pasajes un día, y, al otro, vendiendo empanadas; o al presidente Luis Arce mostrar sus dotes de bailarín, basquetbolista, o tocando algún instrumento; al presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, quien donde quiera que vaya siempre está rodeado de jóvenes que buscan una selfie con el joven político, son pasajes que estos personajes públicos muestran en sus redes sociales, en especial a través de TikTok.

Lejos del control de las normas electorales que prohíben las campañas políticas fuera del calendario electoral oficial, los líderes de la política boliviana, hallaron en las redes sociales, una beta que recién empiezan a explotar para posicionar su imagen. Se muestran como personas comunes, siempre risueños, mostrando su mejor sonrisa y buscando la simpatía de la gente muchas veces con humor y picardía.

Quienes más aprovechan el uso de las redes sociales, en especial el TikTok y Facebook, son los políticos del Movimiento Al Socialismo (MAS), entre ellos Evo Morales, Luis Arce y Andrónico Rodríguez con publicaciones diarias sobre todo en el TikTok con los videos cortos.

Desde la acera de frente, también los políticos de la oposición fueron seducidos por esta red social en los últimos meses, aunque no la usan con la intensidad de los masistas. Entre ellos destacan Samuel Doria Medina, Manfred Reyes Villa y Carlos Mesa.

Para dos expertos, el empleo de las redes sociales en la política es un elemento sustancial a nivel mundial, y Bolivia no es la excepción donde las “redes sociales han llegado para quedarse”, tanto así que incluso más del 50% de las campañas políticas se realizan ahora por estos canales reemplazando a los medios convencionales como la prensa escrita, la radio y hasta la televisión.

 Con otra faceta

“Con los compañeros de Santa Cruz, en Cotoca. Un día de chofer”, se lee en el post de la cuenta de Morales en TikTok, donde tiene un video anclado en el que se ve al político como chofer de un microbús, el transporte público más económico del país.

Entre risas de los concejales de Cotoca que acompañaron a Morales éste pide: “Pasajito por favor”, y más allá, una concejal divertida dice: “me da miedo ya me quiero bajar” y se ríen. Pero Morales no solo hizo de chofer. Ese día también fue un pasajero común y después un voceador que vociferada el destino a “Cotoca, Cotoca” y pedía pasajes frotándose las manos por las monedas que iba a recibir y decía: “ya tengo pega (trabajo)”, en medio de risas.

Y es que el humor y la picardía son los elementos más recurrentes que emplea Morales en sus videos en el TikTok, red donde muestra sus constantes viajes por el país y sus paradas en las carreteras donde aprovecha para conversar con las vendedoras y machucar un poco de coca para pijchar, comprarse patitas de llama con harta llajua, o ponerse a vender empanadas en una carretilla.

En tanto, el presidente Arce, aunque con más formalidad en los videos que publica su equipo de redes sociales, se muestra en una faceta más distendida, en especial en el TikTok donde se encuentran videos cortos de sus actividades que no siempre son publicadas por los canales oficiales.

Entre ellas destacan varios videos donde el mandatario muestra sus dotes de buen bailarín que domina desde la saya afroboliviana hasta el Tinku, su pasión por el baloncesto, tocando algún instrumento de percusión o cuerda, y hasta llevando las riendas de una llama o cargando en hombros a Beto la oveja, esto último, en una entrega de obras en Chuquisaca.

Del mismo modo, Adrónico emplea las redes para mostrar su intensa actividad más allá de sus funciones liderando el Senado. El joven político exhibe sus constantes viajes por el país y sus encuentros con sectores y organizaciones sociales. Destaca en sus videos la cercanía y simpatía que despierta entre las nuevas generaciones sin dejar de lado su estrecha relación con los campesinos.

El legislador recibió hasta propuestas de matrimonio cuando viajó a Tarija a fines de abril: “Andrónico, ¿quieres casarte conmigo?”, se lee en un gran letrero adornado con corazones, y la respuesta tenía dos opciones: “Si o ya”, y entre sonrisas, él marcó ambas, entre gritos y festejos de un grupo de jóvenes tarijeñas.

Entre los tres políticos masistas, Morales es quien tiene más seguidores en el TikTok con 716 mil cuentas que le siguen. En segundo lugar está Andrónico con 170 mil seguidores y Arce con 143 mil.

Entre los líderes de la oposición que decidieron ir de la mano con la tecnología están, por ejemplo Samuel Doria Medina, quien en muy activo en TikTok, red que usa para exponer cortos de los emprendimientos de bolivianos que apoya con su fundación, dar consejos de cómo ahorrar o en qué invertir en tiempos de crisis.

“Si haces un negocio de volumen, por ejemplo, si vendes refrescos, tienes que vender harta cantidad. Si haces un negocio de alto precio, por ejemplo, una manta bien bordada, que sea la única. Así vas a poner un precio alto”, aconseja Samuel a la Warmi Rosa una creadora de contenidos.

En tanto, el alcalde cochabambino Manfres Reyes Villa que tiene 148 mil seguidores en la red de los videos cortos, también es activo aunque no es muy constante, así como el expresidente Mesa que eventualmente usa el TikTok para hablar de algún tema de coyuntura o de temas que le apasionan como el fútbol, el periodismo y el cine. A pesar que tiene apenas 43 publicaciones, tiene 44 mil seguidores.

“Han llegado para quedarse”

El analista político, Carlos Cordero, dijo que el uso de las redes sociales es fundamental pero con un buen manejo porque tienen un lenguaje propio con una comunicación más ágil, veloz y que incorpora varios elementos llamativos como la música, el baile y la interacción de forma novedosa e impactante.

“En Bolivia han tardado un poco en llegar las redes sociales, pero han llegado para quedarse. Cualquier persona que aspire no solo a la presidencia, sino a una diputación o senaturía, alcaldía, lo primero que hace es utilizar las redes para posicionarse, para ser conocido y luego incidir, influir en la política”, dijo el experto y agregó que el político que no tenga presencia en redes “no existe”.


Análisis

"Dan privilegio al uso de las redes por su imagen"

Marcelo Silva / Politólogo

Las redes sociales, son y van a ser un instrumento definitivo de utilización en las campañas electorales, en la promoción de candidaturas.

En Bolivia vemos este tema de manera muy fuerte en los últimos meses, en especial en aquellos personajes que quieren relanzar su imagen como candidatos para las elecciones de 2025.

Hemos visto que además estos personajes en el país han optado e incluso han privilegiado estos medios antes que cualquier otro.

Podemos ver a Carlos Mesa tratando de dar algunos mensajes en el TikTok aunque le falta profundidad y carisma, lo mismo que Samuel (Doria Medina) que se nota que tiene un formato estructurado en las redes sociales, dándole prioridad al TikTok.

No hablar de la gestión del presidente Luis Arce o de Evo Morales que en el último tiempo se han centrado en las redes sociales como instrumento de reposicionamiento de su imagen. También existen alcaldes y otras autoridades que prefieren esa vía.

Eligen las redes sociales porque se convierten en la vía más más potable de comunicación. Gran parte de la gente incluyendo sectores etarios superiores a los 40, aunque con menos proporción, prefieren a las redes antes que ver medios convencionales, es decir, poca gente lee periódicos, poca gente escucha radios y ya no es la misma cantidad de antes la que ve televisión. Es mucho más fácil el acceso al TikTok.

El segundo elemento es porque las redes sociales permiten expresar de manera clara otras facetas, probablemente mucho más cautivadoras que el discurso político, de aquellos que pretenden ser candidatos. Se los ve amenos, bailarines, risueños, juguetones, sociales. El TikTok es un muy buen instrumento para mostrarnos una faceta distinta del candidato que puede generar una mayor empatía que enfrascarse únicamente en el discurso político.