De enero hasta la fecha se registraron en Santa Cruz 8.000 hechos de violencia familiar y doméstica, número que alarma a las autoridades. Éstas realizan esfuerzos en medidas de prevención con la premisa de que estas acciones no se consumen y se eviten fatalidades y dolor en las familias.
La Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia de Santa Cruz (Felcv), dirigida por el coronel Roberto Pórcel, atendió desde enero 8.000 causas que están siendo investigadas en coordinación con el Ministerio Púbico y en control jurisdiccional de diversos tribunales.
Entre los delitos registrados se reflejan feminicidios, agresiones permanentes, ultrajes físicos, abusos sexuales en el entorno familiar y otras agresiones en el que también son afectados niños, adolescentes y personas mayores de edad.
Hasta la fecha, se atendieron ocho feminicidios, 281 casos de violación a personas mayores. También se registraron 436 violaciones a infantes.
Los hechos de violencia, según los registros de la Felcv van en aumento. De seguir esta tendencia, pueden superar las cifras de la gestión 2023.
El año pasado, la Felcv atendió 17 feminicidios, 483 hechos de violación en general. Asimismo, registró 769 casos de violación a menores.
El director de la Felcv coronel Roberto Pórcel aseguró que todos los hechos son lamentables, son fatalidades y cada uno tiene su propia historia. Además, por detrás queda una familia que sufre.
Pórcel resalta la violencia extrema que se evidencia en algunos casos. La primera quincena de abril de este año, se investigó un hecho violento contra una mujer en una vivienda ubicada en el cuarto anillo de circunvalación inmediaciones de la avenida Santos Dumont.
Los policías se dirigieron al lugar ya que el mismo autor pidió la presencia policial. Llamó porque la puerta del inmueble había quedado asegurada y no lograba salir del lugar. Por eso, el sujeto no dudó en comunicarse con la Policía para revelar que había matado a una mujer y la había enterrado en la misma casa.
Durante la inspección realizada por agentes de la Felcv y la presencia de un fiscal, encontraron el cuerpo sin vida de una mujer en una de las habitaciones. Sin embargo, los policías y el fiscal quedaron impactados pues en esa diligencia el hombre confesó que días anteriores también había victimado a otra mujer y sus restos estaban enterrados en el mismo inmueble.
Las investigaciones establecieron que el hombre mató a dos mujeres de 23 y 25 años.
El asesino no se hizo problemas y declaró cómo les quitó la vida. A una la estranguló y a la otra le causó la muerte por sofocación y las enterró.
Las pesquisas establecieron que las víctimas acudían al lugar para comprar tarjetas telefónicas. El hombre hizo amistad, porque les daba crédito y les invitaba gaseosas.
El sujeto había alquilado ese inmueble para la venta de tarjetas telefónicas de diferentes operadoras. Al final fue sentenciado por la justicia a 30 años de cárcel sin derecho a indulto.
El último crimen contra una niña de 8 años en la comunidad de Miraflores, en San Rafael de Velasco, también conmovió a la ciudadanía. La autora del suceso resultó ser una adolescente de 17 años.
Se estableció que planificó el hecho, mató a la niña a puñaladas y con golpes de palo, luego enterró el cuerpo de su víctima. Declaró que lo hizo por experimentar nuevas sensaciones.
La Fiscalía y la Felcv detectaron que ella ya ejercía violencia sacrificando a gatos y perros que tenía de mascotas. Además, cortaba con navaja a sus compañeros de colegio. Fue sentenciada a seis años de reclusión, en el hogar Cenvicruz.
La Felcv tiene siete oficinas en la capital cruceña. En las provincias dispone de 20 oficinas. Su director Roberto Pórcel afirmó que cualquier unidad policial está lista para actuar de manera oportuna ante la denuncia de las víctimas.
Cuando la madre de la víctima fue a buscarla a su casa, le mintió que no la había visto. La niña estaba herida, aún con vida. Confesó que lo hacía por experimentar y aceptó seis años en Cenvicruz. Mataba a sus gatos, perros y hería a sus compañeros