Realizar o no las fiestas carnavaleras depende de cada municipio a partir de este momento. Ese fue el anuncio que hizo el Gobierno nacional, desde donde prefieren no complicarse ante los planes que ya se afinan respecto a las actividades de esta fiesta que se celebrará desde los últimos días de febrero, como punto central.
El anuncio llega desde el Ministerio de Salud, desde donde argumentan que cada alcaldía debe tomar la decisión de acuerdo a los reportes epidemiológicos de covid-19, palabras que fueron expuestas por Jeyson Auza, titular de dicha cartera estatal.
“La realización de fiestas que tienen que ver con el Carnaval van a ser analizados en instancias más locales, siempre con el apoyo del Ministerio de Salud, donde nosotros vamos a informar cuál es la situación epidemiológica y cuáles las posibles consecuencias para que las instancias llamadas a asumir estas decisiones tomen las determinaciones que correspondan”, sostuvo.
El anuncio se da seis días después de que el propio ministro de Salud señalara que Bolivia no está en desescalada de contagios de covid-19, por lo que autorizar el Carnaval sería un error.
Sin embargo, en medio de este contexto desde el Ministerio de Culturas sí levantaron el pulgar a las fiestas carnestolendas y adelantaron que darán su respaldo al impulso de las actividades en Oruro, uno de los epicentros de la festividad en territorio nacional.
Y es que los preparativos ya son visibles no solo en Oruro, sino también en La Paz y en Santa Cruz, región que ha visto un descenso significativo de las infecciones por covid-19, aunque todavía los cuenta por miles (mientras se alistaba esta nota periodística se dio a conocer que este 2 de febrero un total de 1.086 personas se contagiaron con el virus).
Vea la conferencia de Auza:
La realización del Carnaval en Cochabamba está en pleno análisis, mientras que en Sucre será el Comité de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM) quien dará su palabra sobre el futuro de la celebración, este jueves 3 de febrero.
En Potosí, el alcalde Jhonny Llally informó a la red Erbol que se decidió postergar “por el momento” el Carnaval minero con el objetivo de cuidar la salud de las personas y evitar contagios.
“Debemos aclarar que cualquier actividad que se realice en el ámbito cultural como en el ámbito de educación debe garantizar el cumplimiento de las medidas de bioseguridad”, remarcó Auza, al leer las conclusiones de la reunión de coordinación que sostuvo con alcaldes del país para aplacar la cuarta ola de contagios.
Bolivia registró este 2 de febrero un total de 4.145 casos positivos y 34 decesos de covid-19, en un contexto en el que las comparsas y grupos folclóricos alistas sus actividades que se desarrollarán a lo largo del mes y cuyo centro será desde el sábado 26 de febrero hasta el martes 1 de marzo.