Camila, una niña de sólo cinco años de edad, es la primera víctima fatal de la mazamorra que sorprendió la noche del sábado a los vecinos de Bajo Llojeta en la ciudad de La Paz.
La pequeña quedó sepultada por el lodo, en una de las decenas de viviendas afectadas tras la lluvia, que provocó la tragedia en la sede de Gobierno.
La niña no vivía en el lugar, sólo estaba de visita junto a su madre en la casa de uno de sus familiares.
Su padre contó que Camila estaba jugando con su hermana y sus primos en el momento en que fueron sorprendidos por la mazamorra.
La menor permaneció reportada como desaparecida hasta la noche del domingo, cuando finalmente su cuerpo fue hallado y horas después (la madrugada de este lunes) fue rescatado.
“Yo sólo pedía eso, el rescate de mi hija, ahora está aquí, ya sé dónde la voy a poder visitar, ya lo sé. Gracias a los bomberos y a mis amigos del trabajo que me ayudaron a sacar a mi hija”, dijo la madre de la víctima a un medio de comunicación paceño.
También pidió ayuda al alcalde paceño Iván Arias. “Él ha prometido colaborarnos, (ahora) necesito su colaboración”, afirmó.
Según información de la Alcaldía, la mazamorra afectó a al menos 40 viviendas y unas 11 personas resultaron heridas.