Agradecimiento a la labor de los defensores adjuntos, adelantando que en los siguientes días habrá nuevas designaciones; evaluación de todo el personal de la Defensoría del Pueblo, revisar el presupuesto institucional; y finalmente el cabildo en Santa Cruz, esos fueron, básicamente, los ejes de la conferencia de prensa que ofreció el flamante Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya Aro, quien retornó a estas oficinas donde trabajó por 11 años.  


“Respecto de los eventos a suscitarse a partir del 30 (de septiembre, día del cabildo), pues es importante que desde la Defensoría del Pueblo podamos llamar a que se respeten los derechos humanos, si se va a realizar algún acto de protesta, algún acto que implique la manifestación de la disconformidad de la ciudadanía”, declaró el nuevo Defensor al responder sobre el cabildo que se realizará en Santa Cruz.


El 23 de septiembre, mientras 34 asambleístas opositores pedían licencia para distintas actividades, el MAS instaló la sesión de Asamblea y modificando el orden del día planteó la elección del nuevo Defensor del Pueblo. Este martes, el hall de la Vicepresidencia fue el escenario para posesionar a Callisaya Aro en el cargo que ejercerá hasta 2028.


El nuevo titular de esa oficina deslindó responsabilidades en su designación y dijo que él junto con más de 100 ciudadanos se presentaron a una convocatoria y que la nominación obedece a “mecanismos internos” de la Asamblea de la que él no es responsable.


En ese marco, Callisaya pidió que se evalúe la gestión que está empezando y no se parta de la crítica a la forma cómo fue electo. Esas palabras recordaron el discurso del fallecido Defensor del Pueblo, Rolando Villena, quien también fue señalado como un defensor afín al Gobierno de Evo Morales, pero lo fiscalizó desde la Defensoría, lo que le ocasionó una feroz campaña de desacreditación desde el mismo Gobierno.


Respecto del personal, Callisaya dio por concluida la presencia de los defensores adjuntos y dijo que como toda administración que empieza, se requiere de gente que acompañe la nueva dinámica que tendrá esta oficina.


“Un agradecimiento a los adjuntos que han estado en este periodo de interinato y entendemos que esta es una nueva gestión que, como quiere iniciar también un proceso de relanzamiento de la institución, recuperación de la confianza del pueblo para la institución, entonces nosotros vamos a generar nuevas autoridades que vayan con la dinámica institucional que nosotros queremos imprimir a la Defensoría del Pueblo”, dijo.


Asimismo, habló de los delegados departamentales a los que iniciará una evaluación, lo mismo que a los funcionarios, pero desde la perspectiva de la nueva dinámica. Hasta el momento en esa oficina habían funcionarios institucionalizados, los cuales también podrán ser evaluados.


“Estamos con una institución debilitada económicamente, tenemos un presupuesto que supera el 70% únicamente en sueldos y comparativamente tampoco es un sueldo extremadamente alto si uno los compara con otros órganos del Estado. Hay que mirar esa debilidad institucional”, apuntó.


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