El exalcalde de La Paz, Luis Revilla, acudió este lunes a la Fiscalía para declarar dentro del proceso que le inició la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) por una deuda de al menos 23.6 millones de bolivianos.

Sin embargo, aclaró que dicho compromiso económico lo contrajo la Alcaldía paceña, por lo que es “institucional” y debe ser asumido por las nuevas autoridades locales.

“Debo explicarle al Ministerio Público que ya no soy alcalde, y que esta deuda que reclama Emapa es institucional, es de la Alcaldía y la tiene que pagar la Alcaldía", dijo Revilla en contacto con medios de comunicación.

 Atribuyó a la pandemia la crisis económica no solo en La Paz, sino en todos los municipios del país, hecho que en su gestión hizo que se registraran deudas  con proveedores que deben ser asumidas por la nueva autoridad edil, en este caso Iván Arias.

Revilla, tras dejar su cargo, se trasladó a Santa Cruz para pasar algunos días con su familia. Ahí fue notificado por la Fiscalía, por el caso de incumplimiento de contratos con Emapa, para la provisión de suministros entregados en las canastas estudiantiles.

“No hay corrupción, no hay irregularidades, nada. Es un absurdo que el Estado enjuicie al propio Estado”, subrayó el exalcalde paceño.

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