Un nuevo frente de batalla se generó entre ‘evistas’ y ‘arcistas’, esta vez por las acusaciones del diputado Héctor Arce contra el vocero de la Presidencia Jorge Richter y su hija Valentina, quien según el diputado 'evista', se beneficia con grandes montos económicos por publicidad del Estado.
El hecho fue negado por Richter, quien desafió al diputado Arce de renunciar a sus privilegios constitucionales de legislador, e ir a un juicio ordinario para que demuestre sus acusaciones públicas.
Pero Richter fue más allá e introdujo en el tema al expresidente Evo Morales, a quien identifica como el “jefe” de Arce, y quien también lanzó acusaciones contra el hijo del jefe de Estado, siguiendo una estrategia política de involucrar a las familias de las actuales autoridades. Este accionar para Richter es “inaceptable”.
“Hay alguna gente como el diputado (Arce) y su jefe (Evo Morales) que están interesados en que uno tenga que vivir en el lodazal, en el cual ellos se desenvuelven y eso es absolutamente inaceptable”, dijo Richter ante la prensa que convocó para dar su postura frente a las acusaciones de Arce.
El vocero de la Presidencia, en un prólogo para referirse al tema de fondo, señaló que las denuncias de cobros por publicidad estatal contra su hija Valentina, “son absolutamente falsas”. Habló que la acción de Arce se enmarca en el machismo patriarcal y político contra la mujer boliviana, dijo que esto es discriminación, violencia contra la mujer y que como se trata de su hija el tema “es una causa personal”.
A continuación, con su característico tono de voz serena, Richter leyó una carta dirigida al diputado Arce:
“Como las cosas no pueden quedar así, en una difamación y ultraje a mi familia, y como usted hoy goza, en su condición de asambleísta, del privilegio constitucional que dice que los asambleístas, por sus denuncias realizadas en el desempeño de sus funciones, no podrán ser procesados penalmente ni durante ni después de su mandato, viene abusando de este privilegio, y en ese marco, claramente siente impunidad para deshonrar a las mujeres, a los funcionarios y a cuanta persona exprese una opinión distinta de la suya".
Y siguió leyenddo: "De cara al país, le planteo: renuncie a su privilegio constitucional y vamos a un proceso en la Justicia ordinaria. Usted y yo. Pruebe todo lo que ha dicho. Pruebe sus afirmaciones de que hago uso indebido de influencias y de que mi hija tiene una ganancia como la que ha afirmado (…) si usted demuestra lo que afirma, entonces yo renuncio inmediatamente al cargo en el que hoy me encuentro, pero si no logra probar nada y cometió una mentira y dijo una falsedad para deshonrar mi familia, entonces usted se aparta”, dice parte de la carta que Richter le escribió y mandó al diputado omerequeño Héctor Arce.
La acusación
La pasada semana, el diputado Arce, provisto de grandes cuadros con un esquema con fotos, nombres y montos, y manejando un puntero, acusó a la hija de Richter de beneficiarse con unos 320 mil bolivianos al mes por publicidad estatal que recibe para su programa “Mala mente” que se difunde en Tv Of.
“De manera inmediata tiene publicidad de cuatro instituciones del Estado. ¡Imagínense!, de Ende, Minsterio de la Presidencia, tenemos acá de Agencia Boliviana Estatal y tenemos del INE. Al mes haciendo números cobra 320 mil bolivianos mas o menos”, decía Arce.
El legislador masista agregó que se comunicó con el gerente de Tv Of y según él, le ha “confirmado que Valentina Richter cobra cuatro mil bolivianos por 30 segundos de publicidad. Tenemos la información”, afirmó Arce señalando con el puntero la foto de la hija del vocero Richter.
La autoridad aludida, dijo que Héctor Arce ha transgredido cualquier código de convivencia posible y así como Morales atacó al hijo del presidente Arce, ahora “el turno ha sido de Valentina Richter, que es mi hija”, decía Richter y subrayó que la va a defender contra cualquier ataque.
“En este país no se puede seguir permitiendo la violencia contra la mujer, la violencia mediática, la instrumentalización de la mujer, que el hecho de que exista una mujer joven, profesional que hace mucho esfuerzo para formarse, para tratar de expresar su voz, de comunicarse, pues ahora rápidamente se la quiere invalidar en lo más despreciable del patriarcalismo y del machismo de nuestra formación política”, manifestó Richter.