Herlan Ángel Condori Calle es uno de los dos cadetes del Colegio Militar que sufrieron un accidente el pasado 18 de abril en el denominado “salto de la muerte” y, por primera vez, dio su versión de manera pública de lo ocurrido.

Contó que su camarada Cristhian López, quien es el segundo cadete accidentado, “no realizó ninguna práctica desde ahí arriba” de la torre del salto de la muerte y apuntó a sus instructores por lo sucedido.

El error que se cometió de parte de los instructores fue el tamaño de la cuerda que no sabían, ellos no sabían qué tamaño de cuerda se debía dar para el salto de la muerte. Mis instructores de ingeniería son el capitán Herrera, mi teniente Patzi y mi teniente Salas”, dijo a F10 Condori.

 Acerca de la versión de que uno de sus instructores habría dado la orden de que no salten, tal como la defensa de uno de los implicados alegó en su momento, el cadete aseguró que en ningún momento escuchó esa supuesta orden.

En ningún momento había escuchado esa orden, de haber escuchado esa orden no hubiera hecho (el salto)”, afirmó.

A un mes y medio del accidente, Condori aún permanece internado en la Clínica del Sur de La Paz y calificó como un “infierno” todo lo que vivió en su proceso de recuperación.

Estaba dormido casi dos semanas y media, estaba fuera de la realidad, incluso dicen que estaba muerto dos veces, me falta un pedazo de cráneo aquí arriba, no sé si se puede observar y eso lo que más me preocupa (…); no siento de las costillas para abajo, no siento mi barriga, no siento mis aparatos (…), ni mis piernas. He estado conectado a tubos respiratorios, sondas, era un infierno lo que viví durante tres semanas en terapia intensiva”, detalló.

Asimismo, recordó que era instructor de gimnasia y que ganó muchas medallas en distintas competencias.

Pero ahora “ya no voy a poder competir, en mi condición de gimnasta ya no voy a poder hacer ese tipo de competencias”, lamentó. 

Sin embargo, aún espera ser un militar de honor en la medida de sus posibilidades.

Pues, “voy a recuperar, pero de mucho tiempo, requiere tiempo, tiempo y tiempo; ya pasaron como 40 días y aún no siento mis piernas, aún no siento mi barriga ni mis partes inferiores”, insistió.

Por este hecho, al momento existen dos militares encarcelados y un tercer uniformado con detención domiciliaria.

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