Polonia ha invitado a Estados Unidos la colocación de armas nucleares en su territorio. El temor a un ataque ruso es cada vez mayor y el Gobierno polaco sigue siendo lo más duro posible con el agresor. Pero si esta petición no tiene ninguna posibilidad de éxito, este discurso es muy simbólico en la escena nacional.

Para el partido gobernante Ley y Justicia (PiS), es importante ser implacable en sus relaciones con Rusia y Bielorrusia. Las elecciones parlamentarias están previstas para el próximo año. E inevitablemente, la guerra en Ucrania estará en la mente de los polacos.

Así que el partido está multiplicando las decisiones simbólicas. La última petición del presidente Andrzej Duda de estacionar armas nucleares estadounidenses en suelo polaco probablemente no será aceptada. No sería militarmente estratégico y EEUU ni siquiera ha recibido una petición formal de Polonia.

Firmeza hacia Rusia

Pero al adoptar esta rígida postura, el país se muestra como uno de los más duros de la Unión Europea con Moscú. En particular, Polonia es uno de los únicos países de Europa que niega la entrada a su territorio a todos los ciudadanos rusos, incluso con visados Schengen. Y a principios de mes, representantes del partido Ley y Justicia inauguraron a bombo y platillo un nuevo canal marítimo y un gasoducto. Dos infraestructuras para cortocircuitar las importaciones rusas.

Con esta firmeza, el partido intenta mostrarse como el defensor de los intereses de los polacos y los europeos. Espera que los votantes lo recuerden cuando voten el próximo año.

Lea también

Dw

Europa busca en Praga un "nuevo orden sin Rusia"

La primera cumbre de la Comunidad Política Europea, impulsada por Emmanuel Macron, reúne en la capital checa a mandatarios de 44 países entre los que "esta Rusia, la Rusia de Putin no tiene sitio", dijo Josep Borrell