Tuvieron que arder más de siete millones de hectáreas solo en Santa Cruz para que el Gobierno declarare desastre nacional y se activen los mecanismos que permitan canalizar la ayuda internacional, realizar modificaciones presupuestarias, efectuar compras directas y acceder a un fondo destinado a enfrentar la emergencia.

También se reforzará el combate aéreo y una de las primeras medidas, tras la declaratoria, fue el anuncio de la compra de 400 cajas guardián para descargas de agua y la incorporación de un avión Hércules. Además, el presidente Luis Arce reunió al cuerpo diplomático acreditado en Bolivia para informar sobre la situación de los incendios buscando coordinar y gestionar más apoyo internacional.

La declaratoria de desastre también autoriza al Ministerio de Defensa a constituir el fideicomiso, Fondo para la Reducción de Riesgos y Atención de Desastres y Emergencias (Forade), con la finalidad de captar y administrar recursos para financiar la gestión de riesgos en los niveles nacional, departamental, municipal y autonomías indígena originario campesina, tal como lo establece la Ley de Gestión de Riesgos 602.

Este fideicomiso tendrá como fuentes de financiamiento el 0,15% del total del Presupuesto General del Estado consolidado de gastos, aprobado para cada gestión fiscal, cuyos recursos serán utilizados prioritariamente como contraparte para las acciones de gestión de riesgo. Además, de donaciones monetizables, créditos, recursos específicos de cooperación multilateral o bilateral para la gestión de riesgos, recursos generados por el fideicomiso y otras fuentes de financiamiento.

Faculta a las entidades públicas de todos los niveles del Estado, encargadas de  la atención del desastre, a realizar las modificaciones presupuestarias y transferencias entre partidas, de acuerdo a la normativa existente y específica que establezca el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.

También las faculta a realizar la contratación de bienes y servicios, bajo la modalidad de contratación por desastres o emergencias para la atención de la población afectada, lo que significa que acorta los procesos sin licitaciones.

El presidente Arce, durante el anuncio de la declaratoria, explicó que la medida busca lograr cooperación internacional, pero también instó a los legisladores a aprobar los créditos pendientes.

En ese sentido, recordó que el Gobierno nacional, el pasado 11 de septiembre, ya envió a la Asamblea un proyecto de ley para la aprobación de un crédito con la Corporación Andina de Fomento por 75 millones de dólares.

Agregó que, desde la semana pasada se encuentra en la Asamblea otro proyecto para la aprobación de un crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo por 250 millones de dólares.

Arce detalló que estos recursos se necesitan para contratar más aviones que están siendo efectivos en la lucha contra los  incendios, en la compra de más cajas guardián y en equipar algunas aeronaves de la Fuerza Aérea. Señaló que también se requieren recursos para adaptar un helicóptero de Presidencia para hacer  atenciones en salud, para la reconstrucción de viviendas, para movilizar  más efectivos y garantizar la seguridad alimentaria, entre otras medidas.

Por su parte, el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, señaló que la declaratoria obliga a redoblar los esfuerzos en el apagado de los incendios, pero también a trabajar en un plan de recuperación de las áreas afectadas.

Según Novillo, las intervenciones priorizarán los departamentos y municipios declarados en desastre.  “Ahí centraremos toda nuestra atención”, afirmó.

El ministro también anunció la compra de 400 cajas guardián, que se suman a las 200 adquiridas previamente, para fortalecer las operaciones aéreas de descarga de agua en la zona de los incendios. Estas operaciones incluyen el uso de aeronaves, entre ellas el avión Electra Tanker, y se están haciendo las gestiones para reforzar el número de aeronaves. Las FFAA incorporarán otro avión Hércules en los próximos días y se reforzarán las brigadas de combate, además del equipamiento, dijo el ministro.

El Gobierno apuesta al apagado del fuego por aire, combinado con  operaciones terrestres, porque el uso de las cajas guardián han dado bueno resultados en zonas de difícil acceso. Cada una tiene capacidad para almacenar hasta 1.000 litros de agua y están diseñadas específicamente para la mitigación aérea. Estas cajas incluyen un retardador de fuego integrado para maximizar su eficacia en el combate a las llamas. Esto asegura que el agua liberada durante las operaciones aéreas tenga un impacto optimizado, reforzando los esfuerzos de las brigadas de emergencia en el terreno.

El ministro Novillo explicó que, en esta situación de desastre, no solo el Gobierno nacional gestionará los recursos económicos necesarios para reforzar la atención de las emergencias, sino que los gobiernos municipales también tienen la oportunidad de buscar financiamiento internacional. “Como Gobierno nacional, estamos dispuestos a canalizar el logro de recursos”, aseguró el ministro.

Además, destacó que el país ya ha recibido ayuda de Brasil, Venezuela, España, Chile y otros países.

En la misma jornada, el presidente Arce se reunió con los embajadores de países y organismos internacionales acreditados en Bolivia. “La situación que estamos atravesando en el país amerita una mayor cooperación y esfuerzo por cada uno de nosotros, porque este tipo de fenómenos ya no solamente corresponde a la lucha de un solo país”, señaló Arce.

El Gobierno también lanzó un plan de fortalecimiento de salud para atención médica. Como parte de este plan, la ministra de Salud, María Renée Castro, informó que todos los programas se sumarán al trabajo de atención médica que se realiza en los municipios, y también se aumentará la cantidad de ambulancias disponibles.

Además, Castro anunció la distribución de una tonelada y media de medicamentos e insumos médicos, destinados a tratar casos de conjuntivitis, una afección ocular por las condiciones adversas generadas por el humo.

Por su lado, Luis Fernando Roca, asesor general de la Gobernación de Santa Cruz, indicó que tanto el Gobernador en ejercicio, Mario Aguilera, como la Asamblea Legislativa Departamental solicitaron la declaratoria de desastre, para que se consiga la habilitación de recursos extraordinarios.

Mientras tanto, los municipios esperan que la declaratoria de desastre acelere la llegada de ayuda a los lugares afectados por el fuego.

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