San Javier celebración la festividad religiosa en honor a los santos San Pedro y San Pablo. En torno a los actos religiosos, se mantiene una firme tradición de los antiguos piñocas en honor a la deidad representada por el Ñandú Sagrado. Los Yarituses acompañan esta celebración con sus trajes blancos y sus coloridos adornos.
Alrededor de 350 personas yarituses participaron este sábado. Desde temprano acompañaron los rituales como la misa solemne y la procesión de ambos santos, según informó José Burela, secretario de Cultura y Turismo de San Javier.
Durante la procesión, los participantes entonan cánticos en la lengua chiquitana, una parte integral de la ceremonia. Esta festividad tiene un profundo significado cultural y espiritual para la comunidad. Simboliza la gratitud hacia la naturaleza y la cosecha. Además, refuerzan la conexión con la tradición y la fe, indicó Mauricio Quiroz, periodista de EL DEBER que presenció el ritual.
El atuendo y el baile de los yarituses, que forman parte de este ritual, expresa la cosmovisión chiquitana. Los yarituses, figuras emblemáticas de la festividad, representan la vida ligada a la naturaleza, la esperanza y la gratitud. Este sincretismo religioso se expresa a través de la veneración a San Pedro y San Pablo, combinando elementos indígenas y católicos.
Elizabeth La Fuente, periodista de EL DEBER, reportó que a pesar del clima frío, la celebración se desarrolló con entusiasmo y es considerada un evento esencial para la región chiquitana. La festividad es un patrimonio intangible del Estado Plurinacional de Bolivia y refleja una rica simbología y cosmogonía.
Después de la procesión, los asistentes se congregan en el Cabildo indígena chiquitano de San Javier, donde se realizarón actos de bienvenida y confraternización. La celebración incluyó una feria gastronómica, artesanal y cultural en la plaza 3 de Diciembre, además de juegos populares y concursos.
La festividad continúa hasta el 30 de junio, con actividades en honor a San Pablo. Numerosos visitantes llegaron hasta San Javier para observar el ritual. La gran afluencia superó las expectativas de los organizadores.
El director de Cultura de la alcaldía de San Javier destaca que la festividad de los yarituses es un ritual que combina la tradición católica con la cultura indígena. Simboliza un agradecimiento a la Madre Tierra y a los santos por las cosechas. La danza de los yarituses evoca el caminar del ñandú y es una expresión de la rica herencia cultural de la región.
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