La operación pakistaní para vender vehículos del mercado gris también llegó a Santa Cruz. La Policía ayer intervino un negocio de venta de automotores y secuestró 21 camionetas de alta gama que pudieron ingresar desde la zona franca de Iquique, evadiendo el pago de impuestos, además con precios subfacturados.

El gobernador de Potosí, Jhonny Mamani, está detenido en la cárcel de San Pedro tras ser acusado de haber transado con estos ciudadanos asiáticos que trabajan desde el norte de Chile. De hecho, la autoridad detenida es acusada de comprar a este grupo de pakistaníes, a través de un presunto testaferro en El Alto, 41 ambulancias y cinco camionetas para la Policía. Este acuerdo fue anulado por efecto de este caso.

La tarde de ayer policías del Departamento Especializado de Lucha Contra la Corrupción e Investigación de Legitimación de Ganancias Ilícitas y Financiamiento al Terrorismo, incursionó en tres inmuebles ejecutando allanamientos ordenados por el juez Primo Flores. Los policías y la fiscal Mirtha Mejía, llegaron a un autoventa  ubicado entre el segundo y tercer anillo de la avenida Cristo Redentor. Asimismo, a otro inmueble colindante en otro autoventa, mientras que el tercer allanamiento se practicó en dos galpones de la doble vía a La Guardia, entre el sexto y séptimo anillo. 

Las diligencias realizadas tienen su origen en una denuncia del 6 de febrero de 2021, formulada contra el ciudadano Yin Huahg, empresario chino contra Manuel Alejandro Montaño y otras personas por el delito de estafa de al menos 21 camionetas de alta gama. Esta es la razón fundamental que generó la apertura de una investigación paralela por el delito de Legitimación de ganancias ilícitas. 

Dentro de las pesquisas se logró identificar a través de las diversas declaraciones de personas, facturas, documentación y notas de prensa, la existencia de empresas que facilitarían el ingreso de vehículos, que existiría un grupo de extranjeros de nacionalidad pakistaní que estarían internando a Bolivia vehículos chutos, grises o sub facturados.  

Las investigaciones señalan que esta supuesta organización criminal tendría a la empresa importadora exportadora President Line Chile Ltda de Umar Siyab, que había dejado como representante y vendedor en Bolivia a Muhammad Kashif Ilyas o Kashif Tanveer, quien estaría siendo investigado por el delito estafa, falsedad material y otros. 

Así es como operaban
Las investigaciones señalan que Siyab es un empresario pakistaní que trae automóviles de concesionarios en Oriente Medio. Trabaja en Iquique y ofrece “importación personalizada” a través de distribuidores que están en el país. 

En la Zona Franca de Iquique (Zofri) existe, además de un centro comercial, un área industrial a la que solo ingresan “usuarios”, clientes acreditados y vendedores de bienes al por mayor. Los pakistaníes se han especializado en el negocio de la autoventa a clientes en Bolivia y Paraguay. 

También emplean mecánicos de varias nacionalidades, entre ellos bolivianos, que trabajan en la reparación y revisión de los motorizados que llegan, especialmente, desde Dubái, Omán y los Emiratos Árabes Unidos, donde existen concesionarias que trabajan con fabricantes de Japón, Tailandia, China y Corea del Sur, países en los que están ubicadas las mayores fábricas de Asia.

Para la Policía y la Fiscalía, ahora son vehículos comprados en mercados grises. Al ser internados a Bolivia, cuando se fija la base imponible, llegan con un precio ‘subfacturado’. Esto quiere decir que si un motorizado arriba a Iquique con un precio de $us 39.300 (como es el caso de las camionetas Toyota Hilux), allí le hacen un papel de ‘reexpedición’ para que ingrese al país como si el vehículo hubiese costado solo $us 20.000”, de acuerdo a testimonio de uno de los ejecutivos.

Lea también

PAÍS

Informe médico sugiere que Camacho sea internado en un hospital y defensa legal del gobernador pedirá la cesación de la detención

(LEA EL DOCUMENTO) Una junta médica emitió un informe sobre la situación clínica que atraviesa el gobernador de Santa Cruz, quien está detenido en el penal de Chonchocoro, de La Paz