La Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud (Fesirmes)  y la Gobernación acudieron al Ministerio Público para que se investigue la intoxicación masiva de más de 200 brigadistas que participaron el fin de semana en la campaña de vacunación contra la rabia canina.

Fesirmes presentó una denuncia por el delito contra la salud pública contra el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Jaime Bilbao.

Piden que se investigue también el proceso de contratación del servicio de catering por más de Bs 260.000, informó la secretaria general de Fesirmes, Rocío Rivera, que recordó que los brigadistas recibieron alimentos en estado de descomposición durante la campaña.

Aquiles Ricardo Sotillo, del departamento jurídico de la Gobernación, presentó una denuncia por atentado a la salud pública contra representantes de  la empresa, pero también por incumplimiento de deberes, porque se encontraron algunas irregularidades en el proceso de contratación.

Hay un funcionario denunciado, porque en las primeras indagaciones se encontró  que no se cumplieron con los requisitos que exige la norma. En el proceso también pueden incluir a otros.

Sobre los hechos

Los representantes de Fesirmes cuestionan el servicio que afectó a los brigadistas. “Muchos de los alimentos presentaban un olor fétido y estaban infestados de larvas de moscas. Gracias a que algunos brigadistas notaron el estado de la comida, evitaron consumirla, pero otros no tuvieron esa suerte”, observó Rivero. Esta situación provocó síntomas graves en 30 personas que requirieron hospitalización.

Rivero observó la falta de transparencia en la contratación del catering, ya que el Sedes se rehúsa a revelar el nombre de la empresa que proporcionó los alimentos en mal estado y la información no figura en el Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes).

“Tenemos dudas sobre los procesos de contratación, no entendemos por qué se quiere mantener el nombre de la empresa en reserva, no hemos visto ninguna acción efectiva contra esta empresa. Tampoco hemos visto un proceso de contratación en el Sicoes y eso nos genera aún mayores dudas porque estamos hablando de más de 260.000 bolivianos en la contratación del servicio”, dijo Rivero.

También piden que el Sedes explique si se verificó  la licencia de funcionamiento, los registros sanitarios correspondientes porque son ellos, a través de Inocuidad Alimentaria, los encargados  de otorgar los registros.

El director del Sedes, el domingo, en la conclusión de la segunda jornada de vacunación, informó que tras conocer el incidente tomaron las acciones correspondientes.

“Todo el equipo del Sedes ha estado permanentemente interviniendo. Hemos tomado acciones inmediatas, mandamos un equipo de inocuidad a la empresa de catering contratada”, dijo Bilbao, al indicar que el año pasado la misma firma dotó la alimentación.

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