Hace 11 años que la exreina de las tortas en los mejores eventos de Santa Cruz se fue a vivir a Europa. No alzó vuelo por poca cosa, hace ya una década que Fátima Füchtner trabaja en uno de los mejores hoteles de Hamburgo, el cinco estrellas Atlantic Kempinski, donde se desarrolló una buena parte de la agenda de la cumbre mundial G20.

Le tocó cumplir los deseos y ‘caprichos’ alimenticios de los presidentes que conforman este poderoso grupo, entre ellos la anfitriona germana Angela Merkel y el presidente estadounidense Donald Trump.

Varios de los mandatarios mandaron previamente sus listas de preferencias para que los chef de hotel preparen el menú, que debía ser aprobado por el protocolo.

La aventura le valió mucho miedo a Fátima, ante las amenazas de ataques terroristas a la sede de los encuentros.