Sin duda, todos los años del corso cruceño, los bloques más esperados por el público son el de las comparsas femeninas y el de las tradicionales. Destacan por sus alegorías, coreografías, los regalos que llevan para los miracorso y, sobre todo, por su alegría.

A pesar que este año se vio mermada su participación, el paso de estas comparsas fue aplaudido por los presentes. La mayoría de sus alegorías giraba en torno a la fundación de Santa Cruz, Santa Cruz la Vieja o productos típicos de esta tierra, como la caña de azúcar, que fue tomada como temática de las Kuña Porá.

Los Chichis alegraron a los niños con regalos, como es tradición de la comparsa, y los Botaratas desfilaron derrochando dinero de alasitas. Fueron de los bloques más organizados.



Las Barbies. Presentaron atuendos con mucho brillo y de diferentes zonas de Santa Cruz


Botaratas. Desfilaron por el corso con sus tradicionales casacas amarillas y
repartiendo billetes de alasitas


Regalos. Los Chichis nunca llegan con las manos vacías al corso y los niños son los beneficiados

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