La problemática ambiental que aqueja al planeta tiene su principal desafío en el cambio climático.
Esta afirmación se sustenta en que se trata de un reto que afecta a todo el planeta, no importando dónde se produzcan las causas; es de extrema urgencia y requiere de acciones inmediatas, ya que el tiempo se está acabando para lograr soluciones definitivas; y, bajo el punto de vista de sus impactos en la humanidad, sus efectos no solo son más fuertes, sino que también son más frecuentes y nocivos.
En la empresa UNAGRO S.A., lo explicado arriba es de conocimiento y conciencia general, y debido a ello es que se trabaja de forma sostenible, de la manera más amistosa con el medio ambiente.
En la agroindustria de la caña de azúcar, de la que UNAGRO es parte fundamental, con plantaciones propias y de cañeros proveedores, y con un ingenio azucarero integrado con destiladora y deshidratadora de alcohol, el círculo virtuoso es perfecto para la mitigación y adaptación al cambio climático: se trabaja con el cultivo más eficiente que existe en producción de biomasa, el que menos avanza sobre áreas no deforestadas, el que más captura CO2 y lleva ventaja en la relación emisión : captura, y del que, además de múltiples otras virtudes, se produce y comercializa biocombustibles y energía eléctrica que reemplazan a fuentes fósiles.
Con esto, pues, además de ser productor de alimentos como el azúcar ‒un energético humano básico‒, por varios años UNAGRO viene ya produciendo el etanol que, en mezcla con la gasolina, se usa en todos los vehículos bolivianos, generando trabajo, ahorrando divisas, y descontaminando el ambiente a través de un programa que anduvo dormido por décadas y que finalmente se logró poner en marcha oficialmente bajo el liderazgo del presidente de la empresa, el Ing. Luis F. Barbery Paz.
De la misma forma, UNAGRO es productor de energía eléctrica que se genera a partir de bagazo y que, luego de satisfacer la demanda interna de la empresa, inyecta su excedente a la red interconectada nacional, habiendo alcanzado volúmenes anuales suficientes para cubrir la demanda total de municipios vecinos. En este rubro, UNAGRO contribuye también significativamente para hacer más sostenible la matriz energética nacional.
El potencial es aún mayor si se considera que de la agroindustria de la caña de azúcar también se puede obtener alcohol de segunda generación, a partir de los residuos agrícolas de cosecha, y energía eléctrica por la biodigestión de gases como el metano, que se genera con la vinaza.
La realidad es cierta, los aportes son concretos, y las proyecciones de UNAGRO S.A. son aún mayores, razón suficiente para, como firme adherente a los principios del Pacto Global, y comprometida con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, reconocerla como la Primera Empresa Agro-energética del país.