Por: Lic.Daniel Mendoza Morales

Jefe de carera de Auditoría

El auge de los criptoactivos a nivel mundial ha generado un interés creciente en su potencial como alternativa financiera en mercados emergentes. Bolivia no es la excepción y vemos que cada día hay más información relativa a esta nueva alternativa, sabiendo además que, desde junio de la presente gestión, el Banco Central de Bolivia ha levantado la restricción para su uso en nuestro país.

A medida que la tecnología blockchain , continúa desarrollándose y se extiende por América Latina y el mundo, los bolivianos exploran las posibilidades que ofrecen las criptomonedas como Bitcoin y Ethereum, entre otras, para diversificar sus ahorros, protegerse contra la inflación, y participar en la economía global.

Análisis de la situación actual.

Bolivia, luego de haber vivido un tiempo de bonanza durante las últimas dos décadas, impulsado principalmente por la exportación de recursos naturales, especialmente gas y minerales, hoy se encuentra en una situación adversa que obliga a ver y buscar nuevos escenarios, que respondan y den solución a las necesidades económicas que están derivando en una creciente inflación y la depreciación de nuestra moneda local. En este contexto, muchos bolivianos han comenzado a buscar alternativas para proteger sus ahorros y mejorar sus condiciones financieras.

Nuestro sistema financiero, se caracteriza por trabajar bajo regulaciones y normativas que permiten su accesibilidad a un porcentaje limitado del mercado. Hecho que significa que gran parte de la población, a la fecha trabaja sin acceso a los beneficios crediticios u operacionales del sistema financiero. Según datos del Banco Mundial, en 2021 aproximadamente el 42% de los bolivianos no tenía acceso a una cuenta bancaria. Esta situación deja a muchos bolivianos sin acceso a productos financieros básicos como créditos, seguros o servicios bancarios, lo que limita sus oportunidades de desarrollo económico.

Criptoactivos como alternativa financiera

Bajo el escenario ya descrito, los criptoactivos emergen como una posible alternativa financiera para los bolivianos, ofreciendo varias ventajas que pueden ayudar a enfrentar los desafíos económicos y de inclusión financiera del país. Entre las principales ventajas de los criptoactivos en el mercado boliviano se puede mencionar las siguientes:

Protección contra la inflación: Una de las razones más importantes por las que los bolivianos han comenzado a invertir en criptoactivos es la búsqueda de una reserva de valor frente a la depreciación del boliviano y la inflación.

Accesibilidad y descentralización: Los criptoactivos permiten a los bolivianos participar en el sistema financiero global sin necesidad de intermediarios como bancos o instituciones financieras. Cualquiera con acceso a Internet puede crear una billetera digital y comenzar a operar con criptomonedas. Esto es especialmente relevante en Bolivia, donde la inclusión financiera es limitada, y muchas personas, especialmente en áreas rurales, no tienen acceso a servicios bancarios tradicionales.

Diversificación de inversiones: Para los inversionistas bolivianos, los criptoactivos ofrecen una forma de diversificar sus carteras más allá de los productos financieros tradicionales como los bonos, acciones o bienes raíces. Esta diversificación es especialmente valiosa en un contexto económico inestable, donde los criptoactivos pueden actuar como una cobertura contra la incertidumbre económica nacional e internacional.

Remesas y transferencias internacionales: Bolivia es uno de los países de América Latina que recibe más remesas del extranjero. Las transferencias de dinero a través del sistema bancario tradicional o de los métodos tradicionales, como Western Unión u otros, suelen ser costosas y lentas y hoy por hoy, están más limitadas que nunca, por la escasez de dólares en nuestro mercado. En tal sentido, las criptomonedas ofrecen una alternativa más rápida y económica para el envío y/o recepción de remesas, ya que permiten transferencias internacionales casi instantáneas y a un costo mucho menor.

Desafíos regulatorios en Bolivia

A pesar de las oportunidades que los criptoactivos pueden ofrecer, el entorno regulatorio en Bolivia representa un desafío importante. En 2014, el Banco Central de Bolivia emitió una resolución que prohibía el uso de criptomonedas como medio de pago. Esta medida se adoptó en parte para proteger al público de los riesgos asociados con la volatilidad de los precios de las criptomonedas, así como para prevenir el lavado de dinero y otros delitos financieros.

La situación actual de los criptoactivos en Bolivia ha cambiado significativamente en los últimos años. En junio de la presente gestión, el Banco Central de Bolivia (BCB) levantó la prohibición sobre el uso de criptoactivos, marcando un punto de inflexión en la regulación de estas monedas digitales en el país. A través de la resolución 082/2024, se habilitaron canales para la compra y venta de criptomonedas como Bitcoin y USDT, entre otras, permitiendo a los ciudadanos participar en este mercado de forma lícita.

En la actualidad, el mercado nacional está utilizando criptoactivos para realizar transacciones financieras, como una alternativa frente a la escasez del dólar estadounidense. Los bolivianos están utilizando principalmente USDT, una moneda estable vinculada al dólar, para facilitar el envío de dinero al extranjero, realizar pagos y resguardar valor. Sin embargo, es importante destacar que los criptoactivos no son reconocidos como moneda de curso legal, por lo que su uso implica riesgos que son asumidos por los propios usuarios.

A pesar de la apertura del mercado, el país aún enfrenta desafíos en términos de regulación, supervisión y seguridad. La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) y la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) trabajan en establecer normativas que controlen mejor estas operaciones, previniendo el lavado de dinero y otros delitos financieros asociados.

En resumen, los criptoactivos ofrecen nuevas oportunidades financieras en Bolivia, especialmente en un contexto de limitaciones cambiarias. No obstante, los riesgos inherentes y la falta de un marco regulador completamente desarrollado todavía representan barreras importantes para su adopción masiva y segura

Conclusión

Los criptoactivos representan una alternativa financiera atractiva en Bolivia, especialmente en un contexto de inflación, escasez de dólares estadounidenses, falta de acceso a servicios financieros y la necesidad de diversificación económica. Aunque existen desafíos importantes, particularmente en el ámbito regulatorio, el potencial de los criptoactivos para transformar el sistema financiero boliviano es significativo.

Desde UTEPSA y bajo una mirada académica, consideramos que para que Bolivia pueda aprovechar plenamente los beneficios que ofrece el uso de los criptoactivos, es necesario que el gobierno y las instituciones del sector financiero, desarrollen un enfoque equilibrado que proteja a los usuarios, fomente la innovación y permita la participación del país en la economía digital global. Con el marco normativo adecuado, el uso de los criptoactivos podría llegar a ser una herramienta poderosa para mejorar la inclusión financiera y promover el desarrollo económico en Bolivia.