Si bien el actor Alec Baldwin (63) apretó el gatillo del revólver que mató a la directora de fotografía de la película Rust, Halyna Hutchins (41), las declaraciones de otros miembros del equipo técnico indicaron que David Halls, el asistente de dirección, fue quien le entregó el "arma fría", garantizando a la estrella que no tenía balas y era seguro usarla.

Tras casi dos semanas del incidente en el que fue señalado como uno de los cuatro trabajadores que estuvieron en contacto con el arma, el técnico envió un comunicado al periódico New York Post, expresando estar "consternado y entristecido" por la muerte de su colega.

"Halyna Hutchins no era solo una de las personas más talentosas con quien he trabajado, también era una amiga", escribió Halls, que admitió a la policía que no revisó todas las balas en el cañón de la pistola antes de entregársela a Baldwin.


Aunque no se refirió sobre las críticas que lo señalan como el principal culpable, sí pidió mejoras en los sets.

"Espero que esta tragedia lleve a la industria a revaluar sus valores y prácticas para garantizar que nadie resulte herido durante el proceso creativo", añadió.

En su comunicado, Halls también dijo que está "abrumado por el amor y el apoyo". "Mis sentimientos están con todos los que conocían y amaban a Halyna", escribió.

Junto con la armera Hannah Gutierrez-Reed, Halls era responsable de manipular y chequear las armas en el set.

Antecedentes polémicos

Según la prensa estadounidense, en 2019, Halls trabajó como asistente de dirección de la película Freedom’s Path cuando otra pistola cargada se disparó accidentalmente en el set y estuvo a punto de herir a un técnico de sonido.

Halls, que también era el encargado de entregar las pistolas a los actores, fue expulsado de la producción.

Las últimas palabras de Halyna

Otros miembros del equipo de Rust revelaron las últimas palabras de la directora de fotografía.

Los 14 miembros contaron que un aturdido Baldwin exclamó: "¿Qué diablos acaba de pasar?".

Posteriormente, comenzó a brotar sangre del pecho de Hutchins, ella se tambaleó y cayó hacia atrás, en los brazos del electricista jefe del equipo. 

"Eso no fue bueno. Eso no fue nada bueno", fue lo único que dijo Halyna antes de ser declarada muerta.