Hablar de la música que escuchan los jóvenes en la actualidad es como entrar en un laberinto multicolor, pluricultural y tan diverso en el que ritmos nuevos vienen casados con antiguos y con una gran variedad de matices. 

Incluso las clasificaciones de género se ven atomizadas en infinidad de estilos que no solo tienen que ver con la música, sino también con aspectos visuales de los artistas: vestimentas, cortes de pelo, tatuajes y actitudes, entre otras cosas.

 Un estudio de Music Consumer Insight Report de hace cuatro años, identifica a más de una veintena de géneros musicales entre los más escuchados de la actualidad. Es decir que, pese a que los últimos reportes de Spotify indique que los géneros más populares son el trap latino, el reguetón, el pop, el k-pop y el rap, cuando se profundiza en cada uno de ellos se encuentran más subdivisiones. 

Pero además, desde hace tiempo ya la principal fuente de influencia musical es la internet y mucho menos la TV ni la radio. Incluso, el teléfono celular se ha convertido en el medio para escuchar música y en una ‘playslist’ de un chico de hoy pueden convivir canciones de una gran variedad de géneros, según la ocasión y el ánimo. Por otro lado, también están los “fandoms musicales”, que agrupa a los aficionados de determinado género y que son férreos defensores y difusores no solo de la música, sino de la estética de un determinado grupo o cantante.
“Los gustos musicales entre los jóvenes actualmente cambian de una manera tan acelerada que de un año al otro son diferentes y sorprendentes. Por ejemplo, un año atrás nadie pensó que en todo el mundo se hicieran popular los corridos tumbados, que mezclan la música regional mexicana con música urbana, como el rap y el trap”, explica el músico y productor musical Erick Numbela e identifica como principal responsable a Natanael Cano, que es el artista principal en este estilo, pero ya con el cantante Peso Pluma explotó todo. Se hizo popular a escala mundial con Ella baila sola hizo el featuring con él y se hizo popular, pero a escala mundial Ella baila sola. Entraron de golpe en el gusto popular y ahora hay chicos que hasta se cortan el pelo como Peso Pluma”, cuenta Numbela.

El productor, que ha trabajado a nivel local con músicos de diversos géneros, insiste en que “la música en un año es muy cambiante y va hacer así de aquí en adelante. Las redes sociales tienen un valor importante. Imponen una moda, antes tenías que cerrar los ojos y escucharla para que te agrade, ahora tenés que verlo y si te gusta el video o la moda que proponen las seguís y se vuelve tendencia”, asegura Numbela.

El fenómeno Bad Bunny
Sin embargo, desde hace ya algunos años el puertorriqueño Bad Bunny parece dominar las preferencias y lo demuestra su reciente colaboración con el grupo de música regional mexicano Frontera “Un x100to”, tema que es número uno en Bolivia y en gran parte de Latinoamérica.
“Como decía mi profesor de violín: ‘Podés ser el tipo más afinado y tener toda la técnica necesaria, pero si no transmitís o llegás a las personas no vas a tener éxito’. El secreto del éxito es que sepás transmitir, así sean burreras lo que digas. Nadie tiene la varita mágica. Podés cantar mal, pero decís bien las cosas y a la gente le agrada. Para mí, en el caso de músicos como Bad Bunny, tal vez llegan porque están expresando cosas que tocan la sensibilidad de los jóvenes. Ellos han encontrado eso”, comenta el músico e investigador Arturo Molina. Enfatiza también en que muchas veces nos olvidamos que la música siempre ha sido un fenómeno social. 

Si bien los temas de Bad Bunny hablan del amor y de las relaciones, también utiliza su música para abordar temas sociales y políticos. Ha expresado su preocupación por la violencia de género, la corrupción, la desigualdad social y la brutalidad policial. Canciones como “Estamos Bien” y “Soy Peor” son ejemplos de cómo utiliza su plataforma para transmitir mensajes de conciencia social. También aborda temas relacionados con la identidad y el empoderamiento. Ha hablado sobre la importancia de ser uno mismo, sin importar los juicios o estereotipos sociales. Canciones como “Yo Perreo Sola” y “Mia” destacan la importancia del amor propio y la aceptación personal.
“El trap musicalmente es básico, lo que importa es la letra y cómo lo decís. Es como la copla vallegrandina. Sobre la misma melodía se van diciendo cosas picarescas y en el contexto. Como ocurre en el freestyle, que vendría a ser para mí, como la copla moderna”, sostiene Molina.

Un fandom poderoso
Sin duda alguna uno de los fandoms más poderosos y organizados es el de las seguidoras de la boy band coreana BTS, que es la agrupación de k-pop más popular del momento. “Todas las ARMYs (nombre con el que se identifican las seguidoras del grupo) estamos en sintonía, a nivel mundial ponemos todo de nuestra parte para cumplir objetivos o metas ”, comenta Kamila Alvarado Menacho, presidenta de las Army Bolivia Santa Cruz, que agrega que “BTS desde sus inicios ha sabido expresar sus sentimientos y su realidad como personas y artistas (presión social/económica, estrés, lucha constante por alcanzar sueños, suicidio...etc). Estos temas que plasman en sus canciones son cosas por las que muchos jóvenes y hasta adultos de alguna u otra manera han o están atravesando”, lo que considera ha hecho popular al grupo, asegura Kamila. 



¿Qué hay y quiénes están detrás de las batallas de freestyle rap?

Una mirada desde adentro de uno de los géneros musicales que más ha influido en la música actual. Te da una libertad que otros géneros musicales no te dan, asegura Francisco Camacho Paz, Freestyler cruceño Leiter. Quien a continuación detalla los orígenes y el desarrollo de ese género

Texto: Francisco Camacho Paz (Leiter)

Las batallas de freestyle tienen su origen en los Estados Unidos a través del género del rap. Tuvieron su boom alrededor de los años 2015 y 2019 en la cultura hispanohablante. Imagínense que artistas de la talla de Duki, Cazzu, Paulo Londra (entre otros) han iniciado y han dado un paso a la fama usando como herramienta de éxito este movimiento urbano. 

El Quinto Escalón
Pero, ¿cómo fue que inició el boom de las batallas de freestyle a nivel hispanohablante? Dos palabras describen a la competencia más mítica y popular que, aparte de haber dado una repercusión mediática a niveles colosales al movimiento de las batallas de freestyle hispanohablante, sirvió de trampolín para aquellos ídolos argentinos que provocan furor entre sus oyentes: Quinto Escalón.
Imagine esta escena: Una plaza alborotada de espectadores al nivel de no dar cabida a más seguidores de las batallas. Una media de 500 participantes provenientes de todos lados de Argentina. En el medio del tumulto, dos egos combaten (usando de herramienta la palabra de la forma más original e inteligente posible) para conseguir sobresalir y superar los límites de la mente con todo el conocimiento posible. Eso era el Quinto Escalón.


A causa de la popularidad que causó este fenómeno en el país, hubo freestylers que destacaron de entre la multitud y que supieron aprovechar la atención y admiración de sus oyentes para iniciar una carrera musical. Lit Killah, Tiago Pzk, Callejero Fino, Fmk (entre otros) son nombres que han sonado tanto en las batallas de freestyle como en la escena musical de su país (y en el mundo entero). ¿Y qué es lo mejor de todo? Que consiguieron esto a base de sudor, esfuerzo, talento y carisma, cualidades que son indispensables en cualquier artista.

¿Siguen vigentes?
Lastimosamente, todo lo que sube, baja. A partir del año 2020, las views y popularidad que han generado las batallas del freestyle han bajado lentamente. ¿Y por qué ha sucedido esto? En mi opinión, por tres factores:

Toxicidad en el fandom batallero                                                                             Para lástima de muchos freestylers, el público batallero ha adoptado, en su mayoría, una postura vulgar contra varios freestylers, llegando a criticarlos, burlarse de ellos e, inclusive, generar odio masivo a través de las redes sociales contra algunos de ellos. ¿Y esto por qué? Ya sea por la apariencia física del freestyler, ganar batallas de forma injusta (acontecimiento del que el freestyler no tiene culpa alguna debido a que hay un jurado seleccionado que califica las rimas) o por una rima que se ha utilizado en mal momento. Y lo peor de todo, es que hay una regla en las batallas de freestyle la cual es sagrada y hace referencia a que lo que pase en la batalla, queda en la batalla. Y el fandom joven, en su mayoría adolescentes que se ocultan detrás de una pantalla para poder expresar su ‘hate’ con total libertad, no es consciente de que las palabras hieren y molestan a menos que estés en una batalla de rap.

Sobresaturación de
eventos de freestyle
Debido a una saturación de eventos de freestyle por toda Latinoamérica, combinado con una falta de originalidad en los estilos de rapeo, hubo rimas e ideas que han sido repetidas constantemente. 

Este suceso provocó un desinterés de parte de los aficionados con el paso del tiempo. Como las batallas se volvieron tan populares y mediáticas, los freestylers del momento que llamaban la atención de millones de fanáticos decidieron dedicarse a la música y dejar a un lado las batallas porque, aparte de que la industria musical mueve más dinero que las batallas desde siempre, se ha observado casos de freestylers que han pasado por problemas de depresión y psicológicos a causa de la oleada de odio provocada por los fanes.
Trueno, uno de los raperos argentinos más sobresalientes de los últimos años, ha dado a conocer que sufrió de depresión a la edad de 14 años por las críticas constantes que recibía en sus batallas. Tras pasar este momento amargo, decidió tener una carrera musical y le está yendo mucho mejor que antes.

Las modas pasan
porque tienen que pasar
Sumados los dos puntos anteriores junto a polémicas que han involucrado a distintos freestylers de la escena, el bajón de popularidad de las batallas de freestyle fue demasiado rápido a comparación de otras modas. Porque, para desgracia de las personas que rapean porque aman el rap y encuentran un espacio donde expresar todas sus vivencias y problemas del día a día, el freestyle se convirtió en una moda, cosa que afectó la rapidez con la que dejaron de ser populares entre la afición juvenil.

¿Qué hace especial a las batallas de freestyle?
-En sus años, si destacabas en las batallas de freestyle pero a la vez eras bueno componiendo temas y tenías un talento musical, el freestyle te abría muchas puertas y te daba una facilidad para entrar en la industria musical que no te la daba nadie.

-El freestyle rap es un medio de expresión que ayuda y ha ayudado a muchos jóvenes a expresar sus problemas, alegrías, forma de pensar, ideas y te da una libertad que no te la da ningún otro género musical (eso sí, hay que utilizar esta libertad para bien, no para mal)

-Mediante las batallas de freestyle te podés expresar de manera que ningún otro género de la actualidad te permite.

-Las temáticas que abordan las batallas son variadas debido a la libertad que te da este formato. Se pueden hablar de todos los temas posibles que existen actualmente, y esto debido a la presencia de estímulos que rige el formato de las batallas de rap.