Pekín está cambiando el tono confrontacional con la Unión Europea. Ahora parece más dispuesto a lograr un consenso con el bloque y terminar con las sanciones mutuas impuestas recientemente

28 de septiembre de 2021, 17:05 PM
28 de septiembre de 2021, 17:05 PM

Después de las últimas conversaciones que han sostenido representantes de la Unión Europea (UE) y China, el ministro de Exteriores de China, Wang Yi, entregó unas inusuales declaraciones este martes 28 de septiembre, afirmando en una reunión virtual con el alto representante para la Política Exterior de UE, Josep Borrell, que ambas partes "han alcanzado mayores consensos" y que China dialogará y cooperará en temas de derechos humanos.

"Recientemente ha habido más contactos y diálogo entre China y la UE, alcanzándose muchos consensos. Esto ha ayudado a mejorar el entendimiento y a ampliar la confianza mutua. Debemos consolidar este momento positivo y manejar adecuadamente las diferencias", dijo Wang, según un comunicado del ministerio chino de Exteriores. Ambas partes, agregó, deben "buscar terreno común", "reducir el antagonismo" y cooperar en asuntos como la lucha contra la pandemia y contra el cambio climático.

Asimismo, Wang aseguró que China está dispuesta a "dialogar" y a "cooperar" en materia de derechos humanos, pero siempre "en base a igualdad y el respeto mutuo". "Hemos intercambiado puntos de vista al respecto. China está dispuesta a dialogar y a cooperar en los asuntos de derechos humanos bajo la base de la igualdad y el respeto mutuo. Sin embargo, China no acepta sermones y se opone a que nadie se entrometa en sus asuntos internos bajo este pretexto", dijo.

A continuación, el diplomático hizo hincapié en Taiwán, enfatizando que "el principio de Una Sola China es un consenso universal de la comunidad internacional", ante lo que Borrell afirmó que "la UE no busca establecer intercambios oficiales" con la isla.

Las relaciones entre Pekín y Bruselas parecieron agriarse después de que los Veintisiete sancionasen el pasado 22 de marzo a cuatro funcionarios y una entidad china por supuestas violaciones de los derechos humanos en la región uigur de Xinjiang. Estas fueron las primeras sanciones de la UE a China desde la masacre de la plaza de Tiananmen en 1989

Pekín respondió a su vez sancionando a diez europeos, la mitad de ellos eurodiputados, y cuatro entidades, al tiempo que convocó al embajador de la UE en China, Nicolas Chapuis, para presentar una queja formal por las sanciones de Bruselas. Esto provocó que en mayo Bruselas congelase el pacto de inversiones al que había llegado con Pekín en diciembre de 2020.