Las filas por gasolina y diésel duran hasta siete días. En días pasados, la Asociación de Surtidores se declaró en emergencia por problemas en el suministro

4 de noviembre de 2024, 11:28 AM
4 de noviembre de 2024, 11:28 AM

Conductores de motocicletas y coches particulares alzaron su voz exigiendo al Gobierno que tome medidas para resolver la persistente escasez de combustible que afecta de manera significativa su trabajo y su estabilidad laboral. En tanto, las estaciones de servicio, desde la anterior semana se declararon en estado de emergencia por la asignación insuficiente de gasolina y diésel.

A inicios de la semana, se observaron largas filas en varias estaciones de servicio que contaban con gasolina disponible, incluyendo la estación GENEX, situada en la avenida Prefecto Rivas y el Segundo Anillo. 

Los conductores que hicieron fila en este lugar compartieron su frustración, declarando a EL DEBER Radio que llegaron a esperar más de dos horas para poder abastecer sus vehículos. La situación se ha vuelto insostenible, especialmente para quienes dependen del combustible para sus labores diarias.

Los conductores demandan una respuesta inmediata de las autoridades, ya que la falta de acceso regular a gasolina no solo obstaculiza sus actividades, sino que también genera incertidumbre económica y pone en riesgo sus fuentes de ingresos.

Emergencia

En días pasados, la Asociación Departamental de Propietarios de Estaciones de Servicio de Combustibles Derivados de Hidrocarburos y Combustibles en General (Asosur - Santa Cruz) se declaró de estado de emergencia debido a la falta recurrente de combustibles en las estaciones de servicio de Santa Cruz y sus provincias, situación que ha provocado largas colas de hasta siete días para que los usuarios puedan abastecerse.

En el comunicado, Asosur señala que, aunque realizan los trámites necesarios para garantizar el suministro, enfrentan dificultades debido a las asignaciones insuficientes y los cambios de programación, que les obligan a acudir varias veces a las instancias correspondientes para obtener las cantidades necesarias. Estas gestiones implican costos adicionales y generan molestias en los consumidores.

La entidad empresarial recalca que las estaciones de servicio actúan únicamente como operadores y no tienen control sobre la distribución de combustible, la cual es responsabilidad de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y las empresas distribuidoras como YPFB. 

La asociación también aclara que ha intentado colaborar manteniendo personal disponible 24/7, pero la situación persiste.

Por último, las estaciones de servicio se deslindaron cualquier responsabilidad sobre la escasez de combustible, atribuyéndola a las fallas en la cadena de suministro, y solicita a las autoridades una solución definitiva para asegurar el abastecimiento constante en la región.