Gobierno descarta derogación de decretos que endurecen el control de la venta de combustibles
El ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, informó que al menos 50 cisternas con diésel y gasolina están varados en la ruta a Cochabamba, lo que causará el desabastecimiento de las regiones a las que debían llegar esos vehículos.
“En ningún momento se van a derogar las medidas que se están implementando, porque son necesarias”, expresó la mañana de este jueves el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, sobre la demanda de productores de soya y caña de azúcar que bloquean la carretera entre Santa Cruz y Cochabamba, pidiendo la abrogación de los decretos supremos 4910 y 4911.
“Se están organizando dentro de la Agencia nacional de Hidrocarburos (ANH) y la Dirección general de Sustancias Controladas (DGSC) equipos móviles para el registro correspondiente, pero en ningún momento se está cortando el envío y entrega de combustible”, afirmó Molina.
En conferencia de prensa, la autoridad indicó también que al momento hay “una alta comisión de autoridades” gubernamentales que están presentes en el principal punto de bloqueo para tratar de iniciar un diálogo con los movilizados, los cuales en anteriores oportunidades indicaron que solo hablarán con el presidente Luis Arce.
Molina informó que hasta la noche del miércoles había unas 50 cisternas de combustible varadas en esa ruta, lo que ocasiona el desabastecimiento de las regiones a las que debían llegar esos vehículos.
Asociaciones de productores de caña y soya del norte integrado cortaron desde el martes el paso en la carretera a Cochabamba en demanda de la eliminación de los Decretos 4910 y 4911, que tienen el objetivo de incrementar los mecanismos de regulación, control, supervisión y fiscalización en la comercialización de gasolinas y diésel a través de varias modificaciones e incorporaciones al marco legal vigente.
Los transportistas indicaron que no están en contra del bloqueo, pero piden un cuarto intermedio, porque se les acabó el agua y el alimento que llevaban. Los pasajeros, por su lado, realizan trasbordos en mototaxis para acercarse para llegar a su destino o acercarse a otro punto de transporte.
Las normas, aprobadas el 12 de abril pasado, reducen la cantidad de combustibles que pueden vender las estaciones de servicio a personas naturales o jurídicas registradas de un máximo de 20.000 a 5.000 litros por mes.
Esta es una de las disposiciones que fue ampliamente cuestionada por los productores, ya que el sector forestal –por ejemplo– requiere entre 1.000 y 1.500 litros de combustible por día para mantener sus operaciones.
La nueva norma dispone también que los volúmenes de hasta 20.000 litros mensuales se comercializarán en plantas de almacenaje autorizadas por la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), que en general están lejos de los puntos de producción del país.
