A medida que la inflación en Bolivia alcanza el 6,20% anual, el país se posiciona como el tercero más inflacionario de Sudamérica, explica el presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija

14 de octubre de 2024, 19:35 PM
14 de octubre de 2024, 19:35 PM

La inflación se acelera en Bolivia, un reciente estudio realizado en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) al mes de septiembre demuestra que el país se posiciona como la tercera economía más inflacionaria de la región, detrás de Argentina y Venezuela. Este estudio fue realizado por Luis Fernando Romero Torrejón, presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija. El análisis revela que Bolivia presenta una inflación mensual del 0,88%, otra acumulada del 5,53% y anual del 6,20%.

El estudio de Romero ubica a Argentina líder de este ranking con una inflación mensual del 3,5% y una tasa anual desbordante del 209%, mientras que Venezuela se ubica en el segundo lugar, con una inflación anual del 25,8%.

“Bolivia, a pesar de no alcanzar los niveles de estos países, muestra una preocupante tendencia inflacionaria”, advierte el especialista.

El aumento del costo de vida en Bolivia se debe a diversos factores, pero la escasez de dólares parece ser el principal desencadenante, agrega este análisis.

Según Romero, alrededor del 70% del proceso inflacionario de 2024 puede atribuirse a la falta de dólares y al elevado precio de esta moneda en el mercado negro.

Este problema, de naturaleza fiscal más que monetaria, surge de un déficit público sostenido durante 11 años, lo que ha reducido significativamente las reservas de dólares en el país.

“A pesar de las medidas implementadas por el Gobierno boliviano, como la eliminación de aranceles para ciertos productos y un mayor control fronterizo para frenar el contrabando, la inflación sigue en aumento. Estas acciones, aunque bien intencionadas, son vistas como soluciones temporales que no abordan la causa estructural: la escasez de divisas y el desequilibrio fiscal”, advierte el especialista.

En tanto que la devaluación no oficial de la moneda boliviana frente al dólar, estimada en un 60%, junto con la pérdida de poder adquisitivo de más del 40% en lo que va del año, son síntomas de una crisis más profunda.

“La inflación importada, al menos la que proviene de la región, se evidencia que es mínima y relativa. En todo caso, al devaluarse nuestra moneda, por temas inflacionarios y cambiarios, hace atractivo para los países vecinos o limítrofes con Bolivia, comprar productos en nuestro territorio, ya que su moneda tiene más valor que la nuestra, como el caso del sol peruano que está entre Bs. 2,50 a Bs. 3 por 1 solo peruano”, explicó.

Causa

El economista sostuvo que en un 70% de este proceso inflacionario registrado en 2024 se le puede atribuir netamente a la falta de dólares y al precio elevado de esta divisa en el mercado negro.

Agrega que otro factor que explica esta inflación es el déficit público sostenido de 11 años consecutivos que casi ha agotado los dólares administrados por el Estado, generando un desequilibrio en el mercado cambiario, y donde los privados (formales e informales) han llevado sus divisas fuera del sistema financiero nacional, desde hace mucho por la bolivianizacion, y ahora, por la inseguridad que les da el BCB de mantener un tipo de cambio fijo, la existencia de un “corralito bancario” no declarado, entre varias razones.

En este contexto, sostuvo que mientras se apliquen medidas paliativas o coyunturales, el problema inflacionario se puede apaciguar temporalmente, pero no controlar a largo plazo, como ha sucedido en la Argentina.

“Si bien las medidas gubernamentales tienen buenas intenciones, no son oportunas, considerando que este último trimestre del año es más inflacionario, y que el efecto de las mismas tampoco serán inmediatos”, sugirió.

Para el especialista, el Gobierno debe reconocer cual es la verdadera causa de la inflación, solo así se tomarán acciones concretas, objetivas y sostenibles para “desinflar” la misma, “la cual tiene una tendencia alcista, no solo por temas económicos, sino hasta políticos”.

“No vaya a ser que se diga pronto que, si se llevan productos de contrabando de Bolivia a los países vecinos, es porque nuestra economía ha crecido o es pujante, donde más bien lo evidente es todo lo contrario”, añadió.

Inflación importada

En días pasados el Gobierno reconoció el aumento en el precio de varios productos importados y el "contrabando a la inversa" hicieron que la inflación acumulada a septiembre alcance el 5,5 %, la más alta en la última década.

El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, mencionó que el aumento del costo de vida en los países vecinos de Bolivia hace que se importen bienes "a precios elevados" y "genera una presión" para que los productos bolivianos "salgan" a mercados del exterior.

 "Este nivel de inflación es uno de los niveles más altos (...) pero tenemos que señalar que el Gobierno nacional está luchando contra todas estas presiones externas", remarcó.

Montenegro explicó que, "independientemente" de la escasez de dólares que sufre el país desde marzo de 2023, desde agosto se percibe un incremento de los bienes importados y que "están impactando y generando un incremento (interno) en los precios".