La estatal petrolera informó que con este volumen de combustibles se garantiza la demanda interna. Las importaciones llegan a 284.000 barriles de diésel

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4 de junio de 2022, 16:33 PM
4 de junio de 2022, 16:33 PM

En un contexto con irregularidades en la oferta de diésel en el mercado interno y problemas con la logística de transporte, la estatal petrolera informó que se importaron aproximadamente 45,2 millones litros diésel que serán descargados a través del ducto submarino, en el puerto de Arica (Chile), a los tanques de almacenaje de la estación marítima de propiedad de la estatal petrolera para luego ser transportados en un convoy de cisternas hacia el mercado interno boliviano.

La llegada de esta embarcación coincide con la conclusión de los trabajos de mantenimiento de la estación marítima ubicada en la costa del Océano Pacífico, indicaron desde Yacimientos.

El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, sostuvo que centran su mayor esfuerzo en el abastecimiento de diésel, detalló que se está recibiendo en el puerto de Arica el buque con 284.900 barriles del combustible líquido, que equivale a unos 284.000 barriles, volumen que será descargado hacia la estación marítima de propiedad de Yacimientos, sostuvo Dorgathen.

A tiempo de agregar que con este volumen YPFB garantiza el abastecimiento de combustibles. “Estamos cumpliendo con la población, con el sector del transporte público y privado. El precio y la calidad se mantienen en la perspectiva de proteger la estabilidad económica”, dijo el titular de la petrolera estatal.

El trabajo de descarga del combustible estará a cargo de los buzos y técnicos marineros de la empresa Océano Sub, compañía submarina que trabaja para la estatal petrolera, a través de la subsidiaria YPFB Transporte, desde hace más de 25 años en Arica. Esta empresa está a cargo de la Terminal Marítima Sica Sica por donde ingresan los productos terminados hacia Bolivia.

Al puerto de Arica llega un promedio de dos a tres buques mensuales con diésel y gasolina con destino a Bolivia, dependiendo de las condiciones climatológicas que se registran en la región.  

No estamos ajenos a lo que es el cambio climático. Han cambiado las corrientes del mar y el viento”, puntualizó José Ávalos, gerente de Océano Sub.

La descarga

El buque llegó el 2 de junio, al día siguiente se aprobó la prueba hidráulica de la línea submarina. Inmediatamente se inició el izaje de tres boyas (objetos señalizadores flotantes situados en la costa que tienen la finalidad principalmente de orientar a las embarcaciones y la señalización de objetivos sumergibles) para luego proceder al acople con cadena y ancla.

El barco terminará amarrado a las boyas, una vez posicionado se subirá un sistema de manguera flexible que estará conectada a una válvula, luego se realizarán las pruebas de rigor para que no haya fuga. Los buzos revisarán el sistema flexible, la apertura de válvulas de fondo para posteriormente iniciar la descarga del combustible, detallaron desde YPFB.

El combustible comenzará a fluir por el oleoducto submarino de aproximadamente 2.400 metros de longitud, desde mar adentro hacia la costa, donde están ubicadas las cabinas de control, punto desde donde el ducto sigue su recorrido esta vez vía subterránea hasta la estación marítima de propiedad de YPFB, de donde se despachará a los usuarios del combustible.