Una organización criminal operaba en España, Italia, México, Bolivia, India y Libia. Se dedicaba al tráfico de migrantes. En el país, hay agencias de viajes involucradas y también personas que reclutaban víctimas

9 de agosto de 2024, 11:50 AM
9 de agosto de 2024, 11:50 AM

Una mafia internacional dedicada al tráfico de migrantes fue desarticulada ayer en España. Esta banda llevaba ciudadanos bolivianos a Europa y África con visas falsas y tenían la complicidad de agencias de viajes bolivianas que se dedicaban a reclutar personas en varias ciudades del país. A cada víctima le cobraban entre 8.000 y 10.000 euros para ser trasladada a España.

77 personas fueron detenidas ayer en varias ciudades de España. De esa cifra, seis son las cabecillas de esta mafia. La investigación fue realizada desde 2022 y las acciones fueron ejecutadas por la Policía de España, la Europol y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.

Esta organización especializada en la inmigración ilegal de ciudadanos bolivianos contaba con una estructura piramidal perfectamente diseñada con una red de colaboradores en dos niveles: pasadores y personal de logística, que se encontraban ubicados en España, Bolivia, Turquía y Egipto.

Esta mafia transnacional, según la investigación, contaba con captadores y agencias de viaje en Bolivia, que en colaboración con las agencias ubicadas en España, se encargaban de organizar el viaje de los migrantes desde Bolivia hasta Estambul, en Turquía, o El Cairo (Egipto).

En esos países, las víctimas eran alojadas en hoteles hasta que la organización les hacía llegar pasaportes españoles de ciudadanos nacionalizados de origen boliviano que cooperaban con la organización investigada. Con esos pasaportes, los migrantes viajaban a Madrid o Barcelona pasando el control fronterizo haciéndose pasar por sus verdaderos titulares. Toda esta operación para un migrante boliviano llegaba a costar entre 8.000 y 10.000 euros.

Durante la operación policial en España, en la que han participado más de 200 agentes, se realizaron diez registros en domicilios y agencias de viaje en Cataluña, en los que se ha incautado 517.335 euros en efectivo, 11 pasaportes y diversa documentación que fue puesta a consideración para la investigación.

Punto Atenas

Este trabajo de indagación sigue abierto y la colaboración de la Oficina Central de Operativa Documental -Punto Atenas- resultó esencial para el éxito de la investigación, según señalan medios españoles.

El Punto Atenas funciona en Europa como “call center” para la realización de consultas rápidas por parte de cualquier agente policial europeo, que en el transcurso de sus actuaciones detecte documentos con indicios de falsificación o de dudosa autenticidad.

En caso positivo, los agentes del Punto Atenas realizan en un plazo máximo de diez minutos un informe técnico con firma digital, que es remitido al correo electrónico de la comisaría o unidad policial donde están trabajando. “De ese modo, se da una respuesta eficaz y rápida a posibles dudas que se tengan sobre la veracidad de documentos de identidad, viaje o de conducir ligados a la inmigración irregular”, dice parte de un documento del Punto Atenas.

Esta organización internacional estaba asentada en España e Italia y contaba con colaboradores en Libia, Bolivia y México. La investigación, que se inició en el año 2022, tuvo su origen en la detección, por parte de los agentes, de un notable incremento del flujo de inmigración ilegal por parte de ciudadanos de origen indio y la utilización de España como país de paso hacia México. El objetivo final era dirigirse a Estados Unidos o Canadá.

Ese fue el punto de partida de la investigación y según las pesquisas realizadas, los investigadores pudieron determinar la existencia de una organización criminal de carácter internacional, asentada principalmente en las ciudades españolas de Barcelona, Madrid y Bilbao. También estaban en Italia, con colaboradores en Libia, Bolivia y México, que contaba con dos ramificaciones independientes, pero directamente relacionadas y gestionadas por los principales investigados.

En cuanto a la facción de la organización centrada en la inmigración ilegal de ciudadanos de origen indio, la actividad delictiva tenía su inicio en la captación de los ciudadanos en su país de origen. Desde ahí, eran trasladados en avión hasta Bahréin y luego hasta Egipto, para finalizar su viaje en Libia. La organización se encargaba de proporcionarles los visados falsos para el paso fronterizo, así como los alojamientos en las diferentes ciudades de viaje.

En Libia

Una vez en Libia, las víctimas eran embarcadas en pateras (botes grandes) con más de 130 personas hasta la isla de Lampedusa, en Italia. Estas personas soportaban trayectos de 28 horas, sin agua y sin comida.

Las víctimas bolivianas sufrían algo similar. Eran llevadas desde Bolivia hasta Turquía o Egipto y de ahí eran trasladadas a España en buses o vía aérea.

Ayer, la Policía Boliviana anunció que pedirá a sus pares de España, a través de la Cancillería, información sobe la organización criminal que se dedicaba al tráfico de bolivianos en el país europeo.

“Nosotros vamos a hacer las solicitudes, vamos a conversar con el Ministerio de Relaciones Exteriores para que, a través de nuestra Embajada (en España), se solicite la información sobre los bolivianos que hubieran sido identificados o que hubieran sido encontrados con documentación falsa”, informó a la red RTP la directora general de la unidad de Lucha Contra la Trata y Tráfico de Personas, Carola Arraya.

La autoridad policial añadió que todavía no conocen a detalle el operativo ejecutado por la Policía de España; pero que, desde Bolivia, colaborarán con las investigaciones una vez se remitan los informes del caso.

“Lo único que sabemos es sobre la organización criminal, que se tienen detenidos y que se ha secuestrado dinero y otras pertenencias. Sin embargo, no hay información sobre los inmigrantes a los que se hace referencia. Es una información delicada y esperemos a que la Cancillería pueda obtener información oficial”, agregó Arraya.

En abril de este año, 69 ciudadanos bolivianos fueron detenidos en el puerto de Barcelona, España, por portar visas falsas. Este grupo era parte de un viaje de MSC Cruceros que salió de Brasil. Tras estar varados por dos días, el gobierno español determinó que los ciudadanos bolivianos -con 14 niños- sean deportados de vuelta a La Paz. Son esta medida, las autoridades españolas permitieron al navío, con 1.400 pasajeros a bordo, seguir su viaje con destino a Italia.