Jeanine Áñez cree que los nuevos procesos en su contra en la vía ordinaria, por los casos de Sacaba y Senkata, sólo buscan “ajusticiarla” por una “venganza y odio” de Evo Morales.

13 de abril de 2023, 9:49 AM
13 de abril de 2023, 9:49 AM

La expresidenta Jeanine Áñez consideró que es un “show” la búsqueda de su declaración ante la Fiscalía por las muertes en la crisis de 2019 porque asegura que debe ser procesada mediante un juicio de responsabilidades en su condición de exmandataria y no por la vía ordinaria como ahora se procede.

“Un primer elemento es que no voy a declarar porque ustedes no son competentes para juzgar a una expresidenta porque me corresponde un juicio de responsabilidades y un segundo elemento es que este show ya lo pasé ante la Fiscalía General del Estado hace más de un año y por la misma causa ante el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa”, respondió Áñez a la Fiscalía el miércoles, según documentos publicados por la misma exmandataria en sus redes sociales.

El miércoles, 12 de abril, Áñez debía declarar, primero, en calidad de sindicada por el caso Senkata y luego, en calidad de denunciada, por el caso Sacaba, pero en ambos procesos se abstuvo de emitir su versión.

Después, mediante sus redes sociales –que son administradas por sus familiares desde que está detenida– justificó su decisión y aseguró que en realidad no hay ninguna intención de esclarecer los hechos, sino en su criterio sólo se busca “ajusticiarla” por una “venganza y odio” del expresidente Evo Morales. 

“Me abstuve de declarar por nuevos procesos que el régimen abre en mi contra sin que el MAS tenga ninguna intención de esclarecer la verdad histórica de los hechos, sino de ajusticiarme por la venganza y el odio del cobarde que renunció y huyó”, afirmó la exmandataria, que está detenida en el penal de Miraflores de La Paz por el supuesto “golpe de Estado” de 2019.

El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), formado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), estableció que hubo “masacres” en Sacaba y Senkata, donde en noviembre de 2019 al menos una veintena de personas murieron durante una intervención militar ejecutada con base en un decreto emito por el entonces gobierno de Áñez.