"A 1.338 días de mi encarcelamiento como trofeo y presa política del régimen del MAS, jamás quebrarán mi espíritu ni mi fe", asegura Jeanine Áñez

12 de noviembre de 2024, 10:11 AM
12 de noviembre de 2024, 10:11 AM

En medio del constante debate de si fue “fraude” o “golpe” lo ocurrido en la crisis de 2019, la expresidenta Jeanine Áñez recordó este martes que un día como hoy, de hace cinco años, asumió el mando del país y aseguró que lo volvería a hacer por la democracia.

“El 12 de noviembre de 2019, con mediación de la Iglesia, dos expresidentes, parlamentarios del MAS y de la oposición, acordaron que la vía de pacificación del país, luego del fraude, renuncia y huida de Evo Morales y su cúpula, era la sucesión constitucional”, afirmó la exmandataria mediante sus redes sociales.

La expresidenta –que ahora está encarcelada precisamente por la crisis de 2019– agregó que asumió su “deber por amor a Bolivia y con fe en Dios y en el pueblo”, que entonces era “víctima de la violencia de grupos armados masistas”.

Asumí mi deber y volvería a hacerlo por la democracia y la libertad. El amor es más grande que el odio de los culpables del fraude (…). A 5 años de mi juramento ante Dios y la patria como presidenta constitucional de Bolivia y a 1.338 días de mi encarcelamiento como trofeo y presa política del régimen del MAS, jamás quebrarán mi espíritu ni mi fe”, remarcó.

La exmandataria, que enfrenta una serie de procesos penales en la vía ordinaria, e incluso ya fue sentenciada en uno de los casos por presunto “golpe”, insistió que es “inocente”.

“Amo a mi país, resisto cada día, lucho por la unidad que erradicará al régimen del MAS que nos condena a la división entre bolivianos y al socialismo totalitario ¡Viva Bolivia!”, puntualizó.


"Autoproclamación"

Actores políticos del MAS, como el exprocurador y abogado evista Wilfredo Chávez, también insisten en que lo sucedido en 2019 fue un “golpe de Estado”.

Chávez, mediante su cuenta en X, señaló el domingo que las Fuerzas Armadas “se insubordinaron y asestaron el golpe de Estado”.

“Nunca hubo fraude, lo demostramos analizando las 34.555 actas. Luego vendría la autoproclamación, las masacres y la dictadura de la cleptocracia”, sostuvo.

El 10 de noviembre de 2019, el entonces presidente Morales renunció a su cargo en medio de protestas que denunciaban un supuesto fraude electoral, un motín policial y una “sugerencia” de las Fuerzas Armadas para que dimitiera. 

Dos días después, la entonces segunda vicepresidenta del Senado, Jeanine Áñez, asumió la presidencia de ese órgano camaral y luego el mando del país.