El mandatario llamó a los militares a recuperar la confianza del “pueblo humilde” y un rol protagónico en el proceso de cambio

7 de agosto de 2021, 13:28 PM
7 de agosto de 2021, 13:28 PM

En el acto de celebración por el 196 aniversario de las Fuerzas Armadas (FFAA), realizado en Sucre, el presidente Luis Arce Catacora volvió a reforzar la narrativa oficialista sobre los hechos ocurridos en 2019. En la parte final de su discurso, el Jefe de Estado instó a los uniformados a no participar nunca más en “golpes de Estado y rupturas constitucionales”.

Después de seis años, la parada militar por el aniversario de las FFAA se realizó en la ciudad de Sucre. En los actos participaron los principales jefes y guarniciones militares del país. Y fue donde Arce volvió a hablar sobre el "golpe de Estado".

Haciendo un repaso histórico desde la fundación de las fuerzas regulares del país, el mandatario dedicó un apartado sobre los conflictos sociales ocurridos después de las fallidas elecciones de octubre de 2019, anuladas por indicios de fraude. Esto derivó en la renuncia irrevocable de Evo Morales, no sin antes denunciar un golpe de Estado y huir al exilio. La narrativa de golpe de Estado es reforzada desde el retorno del Movimiento Al Socialismo (MAS) al poder.

En este contexto, Arce sostuvo que el país pasa por momento histórico “en que salimos de una crisis heredada del gobierno de facto” y cuando los uniformados deben cumplir su rol protagónico.

Las FFAA nunca más deben ser parte de un golpe de Estado y de rupturas constitucionales, no deben ponerse a la orden de potencias hegemónicas y reprimir al pueblo boliviano”, dijo.

Además, llamó a los militares a “recuperar la confianza del pueblo humilde. Para avanzar en la construcción de la patria, una patria despatriarcalizada, libre de racismo y de toda forma de discriminación”.

Arce señaló que “el reciente golpe de Estado de noviembre de 2019 y el año del gobierno de facto” demuestran el acecho de sectores conservadores que buscan el poder de forma violenta para restaurar sus intereses en desmedro del pueblo”.

“Esa lamentable aventura, a la que contribuyeron algunos malos militares, intentó enlodar a toda la institución militar con masacres al pueblo”, expresó.

Por eso llamó a los militares a comenzar un nuevo ciclo que refuerce el proceso de cambio iniciado durante el Gobierno de Evo Morales. Aseguró que partir de su gestión comienza “una nueva época para nuestras Fuerzas Armadas”.

El pueblo les está esperando para caminar juntos; no les dará la espalda, no tocarán las puertas (de los cuarteles) para que conspiren contra la democracia”, dijo el mandatario y añadió: “Solo les va a exigir que cumplan su rol de defender la soberanía y construir el desarrollo de la nación”.

Antes del discurso del presidente, el comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, César Moisés Vallejos Rocha, hizo un llamado a la unidad entre los uniformados y además recordó que los militares son parte del pueblo.

Aprovechó la ocasión para remarcar las labores de las fuerzas militares, como los aportes en la lucha antidrogas, el freno al contrabando y el soporte al pago de bonos como el Juancito Pinto, así como la seguridad general para la población.

Con este acto, Bolivia cerró los festejos por los 196 años de independencia, no obstante, estos han sido empañados por la fuerte tensión política que vive el país por posturas encontradas sobre los hechos de 2019.

El Gobierno se empeña a sostener el relato de golpe de Estado, que se ha sido reforzado con la detención de exautoridades, civiles y militares de la administración de Jeanine Áñez, que permanecerá detenida hasta 2022 acusada de gestar del derrocamiento de Evo Morales y por otros delitos que se le imputan.