El Estado Plurinacional ocupa el lugar 118 entre 191 países en el ranking de Naciones Unidas 2021/2022, por encima de Venezuela y debajo de Cuba. Asimismo, presenta incidencia de la pobreza multidimensional, de acuerdo a datos de 2023

13 de julio de 2023, 7:40 AM
13 de julio de 2023, 7:40 AM

Si bien desde el año 1999 al 2004 el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de Bolivia se caracterizó por ir en descenso, y por subir en el periodo 2005-2019, una vez superada la pandemia, los números no muestran una mejoría.

En 2020, el ranking del IDH de Naciones Unidas ubicó al país en la lista de países con desarrollo humano medio, y en la gestión 2021/2022 hay más bien una tendencia al estancamiento. En este informe, Bolivia ocupa el puesto 118, por debajo de Cuba (sitial 83), y con mínima diferencia por encima de Venezuela.

El IDH mide indicadores como la esperanza de vida para la salud, años esperados de escolaridad, promedio de años de escolaridad para la educación e Ingreso Nacional Bruto per cápita para el nivel de vida, tiene como finalidad
determinar el nivel de desarrollo que tienen los países del mundo.

El economista Darío Monasterio resaltó que el país está enmarcado en la misma posición en el ranking mundial y de Sudamérica y Latinoamérica desde hace décadas.

Para él, todo este modelo económico social-comunitario-productivo no ha sido eficiente en poder sacar a Bolivia de los últimos lugares, en cuanto a calidad de vida y bienestar de su población.

Asimismo, dijo que, “sugestivamente, los peores lugares los ocupan los países aliados en el Socialismo del Siglo XXI desde 2006, y que Bolivia tiene la peor esperanza de vida de Sudamérica y junto a Venezuela, los ingresos per cápita más bajos, lo que da una medida del nivel de desarrollo del país.

“Esto significa que un gobierno supuestamente socialista, del MAS, no ha logrado mejorar el nivel de desarrollo de sus habitantes, tras más de 17 años de gobierno, lo que implica un total fracaso en sus políticas sociales y económicas”, cuestionó.

De acuerdo a la lectura de la Fundación Jubileo, al 2021, Bolivia tuvo un IDH de 0,692, que sitúa al país como uno de los países con menor desarrollo humano.

Asimismo, la Fundación Jubileo recordó que diferentes organizaciones internacionales han propuesto diferentes metodologías para realizar mejores diagnósticos y focalizar de manera efectiva e integral las políticas públicas para mejorar la calidad de vida, y que en ese marco se analizan tres indicadores que miden el bienestar, más allá del crecimiento económico: el Índice de Prosperidad; el de Progreso Social; y el de la Felicidad.

En el primero, Jubileo observó que entre 2007 - 2021, Bolivia tuvo una calificación promedio de 51,9 sobre 100. “Desde 2007 ha bajado en cinco posiciones, para 2021 llegó al puesto 106 de 167 países, con un puntaje de 52, debajo del promedio de América Latina y el Caribe (57,5), siendo uno de los países peores situados en América del Sur, antes de Venezuela que
ocupa el puesto 145”.

En cuanto al Índice de Progreso Social, para Jubileo, pese a que desde 2011 Bolivia mejoró su calificación, de 62,7 a 67,7; en 2021 retrocedió tres posiciones en el ranking general, situándose en el puesto 89 de 168 países.

En el país, el nivel de felicidad descendió desde el año 2012 ocupando, a 2021, el puesto 71 entre 148 países, de acuerdo con el Informe Mundial de la Felicidad 2022.

Pobreza multidimensional

Otro informe de Naciones Unidas es el Índice Global de Pobreza Multidimensional (IPM) 2023, identifica carencias agudas en salud, educación y nivel de vida, a través de una decena de indicadores: nutrición, mortalidad infantil, años de escolaridad, asistencia escolar, acceso a combustible para cocinar, saneamiento, agua potable, electricidad y vivienda, y
propiedad de activos.

Según Monasterio, en el IPM también “nos encontramos en los últimos lugares de pobreza multidimensional de Sudamérica, muy
levemente en el promedio de Latinoamérica, y con una situación en pobreza de más del 37%”.

Para él, Bolivia retrocedió en indicadores de años anteriores porque el modelo económico implementado no ha dado empleo de calidad, ni ingresos sostenibles, y la generación de emprendimientos capaces de generar empleos
ha sido basada principalmente en el capitalismo de Estado, en el empleo público, y también en la informalidad, “que no genera beneficios sociales”.

Por su parte, Franco Albarracín, experto en derechos humanos del Centro de Documentación e Información de Bolivia (Cedib), dijo que nuevamente el país está ubicado en bajos puestos, y atribuye esta situación a varios factores.

En primer lugar citó la desigualdad económica en la distribución de ingresos y acceso a servicios básicos. “La brecha entre ricos y pobres no ha cambiado significativamente, a pesar de los importantes ingresos que tuvo Bolivia con la venta de gas al exterior”.

Observó que Bolivia presenta limitaciones significativas en los servicios de salud, con falta de inversión adecuada, lo que impacta en el desarrollo humano. Agregó que la historia se repite en el ámbito de la educación.

Sobre el concepto de pobreza, aludió que afecta especialmente a indígenas y campesinos de zonas rurales. Y en lo que respecta al estado de derecho y gobernanza, opinó que la mayoría de los estudios sitúan a Bolivia en los últimos lugares en términos de estabilidad, confiabilidad e independencia de los órganos de administración pública, factores que obstaculizan la inversión extranjera.

PARA SABER
IDH EN EL PASADO
Entre 1990 y 2021, el valor del IDH de Bolivia cambió de 0,550 a 0,692 , un cambio del 25,8%. Después de 2020, con la pandemia, hasta el
informe de 2021/2022, el incremento no ha sido significativo, no ha pasado de 0,692. El país se mantiene en la lista de los países con
desarrollo medio.

POBREZA MULTIDIMENSIONAL
En el periodo 2008–2016, Bolivia fue uno de los países que redujo a la mitad su índice de pobreza multidimensional.